lunes, 9 de septiembre de 2019

MAD MAX: SALVAJES DE LA AUTOPISTA. EL NACIMIENTO DEL MITO


"Mad Max. Salvajes de la autopista" fue el debut en la dirección del australiano George Miller y el comienzo de una de las grandes sagas cinematográficas de acción de culto de la historia.

A pesar de ser una película con una trama muy normalita y muy simple, fue un "boom" total y absoluto a nivel comercial que instauró una moda que todavía tiene éxito y que todavía es imitada o parodiada.


La influencia del futuro post-apocalíptico que presentó esta saga (más patente a partir de su segunda entrega, porque en la primera el mundo parece estar "yéndose al carajo" pero todavía no ha llegado a tal grado) está en miles de películas, videojuegos, cómics y hasta novelas.

Es el de "Mad Max" un futuro desértico de ciudades abandonadas dominado por la ley del más fuerte en el que bienes como el agua o la gasolina son extremadamente preciados y en el que surgen héroes y antihéroes solitarios que vienen a "equilibrar la balanza".


"Mad Max" catapultó a la fama de manera fulminante a Mel Gibson, que entregó con mucha gracia y carisma a uno de sus personajes estrella, y dio para, hasta ahora, tres secuelas mas.

Aunque como he dicho el guión de esta primera película de la franquicia no es especialmente bueno (personajes planitos, malos flojos, drama predecible), la orgía de acción cumple de sobra y está cargada de potencia, mientras que la violencia que contiene (queda sugerida incluso una violación, y hablamos de una cinta "comercial" de 1979) fue en su día bastante impactante.


Además, conectó todo esto perfectamente con ese final de la década de los setenta y ese principio de la de los ochenta en el que estallaba el movimiento punk, que de una forma u otra se comía con desencanto al hippie de años anteriores.

"Mad Max. Salvajes de la autopista" es un clásico más por su estética y por su concepción visual y ambiental que por su trama, pero desde luego que es una película de culto.

Sus secuelas, de diversa calidad, también lo serían y exagerarían todavía más las bases de este personal futuro distópico y salvaje.


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