viernes, 30 de abril de 2021

FALCON Y EL SOLDADO DE INVIERNO. UN FANTÁSTICO THRILLER POLÍTICO

FALCON Y EL SOLDADO DE INVIERNO de Malcolm Spellman - 2021 - ("The Falcon and the Winter Soldier")

La última estrategia de Marvel en lo referente a series creo que está siendo muy acertada: está produciendo muchas, cortas, y todas muy, muy relacionados con los últimos eventos del UCM en todos los aspectos.

Primero "Wandavision". Ahora "Falcon y el Soldado de Invierno". Próximamente, en muy poco tiempo, "Loki". Así, debido a todos los retrasos que hay pendientes por la actual crisis sanitaria (que parece que por fin está llegando a su fin), el mencionado UCM sigue en el candelero.

Además, estas mini-series están teniendo, hasta ahora, bastante calidad. "Wandavision" era, incluso, experimental. En este blog la comento (en esta etiqueta la tienen). Y "Falcon y el Soldado de Invierno" no ha decepcionado (a mí por lo menos).

Ahora pasamos de los mundos psíquicos al puro thriller. Y tenemos seis capítulos en donde este género se mezcla con la acción, con lo superheróico y con su parte de ciencia ficción. Y tenemos, sobre todo, unos personajes fantásticos.

Los dos protagonistas principales, los que dan título a la serie, son bombas de carisma. Su desarrollo en las películas se ve ampliado hasta puntos inesperados y ambos se muestran como seres con traumas, con miedos, en absoluto perfectos, que cometen errores y que son incapaces de abandonar sus pasados o de avanzar con decisión en sus nuevas vidas. Un diez, por cierto, para Anthony Mackie y para Sebastian Stan por sus papeles.

De los secundarios se puede decir lo mismo. Son numerosos y son todos, absolutamente todos, interesantes. Más si cabe que los propios protagonistas, de hecho, y miren que como he dicho estos son intersantísimos. 

De hecho, se puede decir que en algunos aspectos son hasta más importantes. Además de estar también excelentemente interpretados, componen un conjunto de seres en los que no cabe ningún maniqueísmo. 

"Falcon y el Soldado de Invierno" ha cuidado especialmente este aspecto. Es una escala de grises total. Es ambigua incluso. Se ha acusado a los productos del UCM de ser maniqueos. Algunos pueden serlo, pero no lo son todos, y desde luego esta serie está en este segundo grupo.

Nada es fácil en esta trama sobre política, sobre terrorismo, sobre las líneas que hay entre ambos, sobre la guerra, sobre las causas y las consecuencias y los fines y los medios. Nada está masticado, y no hay soluciones mágicas: el tono es agridulce en todo momento, y las conclusiones también. 

El guión, que bebe mucho del mejor Ed Brubaker (un guionista de cómic básico para el Capitán América y sus secundarios en los últimos tiempos), es una delicia de las escalas de grises que nos hace pensar constantemente en muchas, muchas variables y posibilidades para un conflicto político y social que se parece bastante a muchos que tenemos hoy en día (y que hemos tenido en el pasado).

Finalmente, "Falcon y el Soldado de Invierno" está directamente relacionada con acontecimientos futuros del UCM. Es una serie que no se limita a ser una comparsa o un complemento: es una serie vital para lo que está por llegar, que avanza en la trama central, que aporta sin parar. 

Si el resto de creaciones para las pequeñas pantallas que vienen en camino de este UCM son como "Wandavision" y, sobre todo, como ésta que hoy comento, el cuadro promete. Desde luego.

miércoles, 28 de abril de 2021

MARIQUITA. UNA DURA Y BELLA HISTORIA SOBRE LA LUCHA CONTRA LA HOMOFOBIA

MARIQUITA de Juan Naranjo - 2021 - ("Mariquita")

No sé si catalogar, en las etiquetas del blog, a "Mariquita" como un libro o como un cómic, así que lo voy a colocar en ambas. Podría ser también un libro ilustrado. Todo esto no es importante: lo importante es lo necesaria que es esta obra.

Juan Naranjo, youtuber conocido como Juanito Libritos (suele hacer críticas de libros y de cómics en su canal) narra en esta primera obra suya su experiencia como hombre gay en el mundo profundamente homófobo de su infancia y de su adolescencia.

Por suerte, y aunque queden cosas por hacer, España ha cambiado mucho en los últimos años. La España de los ochenta y de los noventa era muy diferente a la España de hoy. 

La moral rancia de una dictadura que todavía no hacía tantísimo tiempo que había terminado pesaba en muchos aspectos de la vida y uno de estos aspectos era, evidentemente y como ocurre por desgracia en tantas culturas a lo largo de todo mundo, el de la sexualidad. Y, concretamente, la represión sexual, entre otros muchos aspectos, valga la redundancia, se manifestaba con especial virulencia en la homofobia.

Juan Naranjo narra, con un dibujo "naif", pintado con acuarelas, sencillo pero muy tierno y efectivo, cómo desde que era un niño fue llamado "mariquita" y cómo tuvo que pelear prácticamente desde ese mismo momento hasta su llegada la universidad por afirmarse con orgullo como homosexual.

"Mariquita" puede engañar por su dibujo. Lo digo ya: no esperen algo "para niños" (sin ánimo de despreciar a los niños, ese público del que habitualmente se piensa que es "tonto" o que "no entiende nada"). "Mariquita" es duro. Muy duro. Hay pasajes que son verdaderamente descorazonadores.

Aunque su autor narra sus terribles vivencias con optimismo e incluso en algunos momentos con claro humor, lo que cuenta ni es bonito ni tiene gracia.

Vamos a asistir a un catálogo lamentable de homofobia social, institucionalizada casi, donde no falta de nada: desde marginación en la escuela o en el barrio hasta desprecio abierto en el seno de la propia familia pasando por pura violencia y puro odio a la persona que es diferente.

El mensaje final es optimista, como he dicho, pero antes de llegar a este final luminoso hay que pasar por un auténtico calvario donde el propio autor se enfrenta a todo lo mencionado y, además, a una de las cosas más terribles que se pueden encontrar: la interiorización de la propia homofobia. 

"Mariquita" nos habla de cosas monstruosas, sí. También, por suerte, de superación y de orgullo, de apertura de mente, de amor y de amistad, de lucha por derechos y, además, del poder de la cultura, en cualquiera de sus manifestaciones, para sanar y cambiar el mundo.

Finalmente, este libro es también un homenaje a las personas que son o que fueron importantes en la vida de Juan Naranjo: desde su madre a su mejor amiga pasando por su primer novio.  

"Mariquita" es una obra bella, como he dicho dura, pero inspiradora. Está hablando de un hombre gay, pero su mensaje se extrapola a todo colectivo, a toda persona que haya sido marginada o perseguida o señalada o ignorada. No puedo dejar de recomendarla: es como he dicho al principio de la reseña, necesaria. Para recordar de dónde venimos y lo que no podemos perder.

lunes, 26 de abril de 2021

TERCIOPELO AZUL. DAVID LYNCH ENSAYA SU FUTURO TWIN PEAKS EN UN NOIR MAGISTRAL

TERCIOPELO AZUL de David Lynch - 1986 - ("Blue Velvet")

Con "Dune", y en bastante parte no fue por culpa suya, David Lynch tuvo un sonado patinazo artístico y comercial. Se recuperó por suerte con "Terciopelo azul", que terminó de confirmarle (si es que "Cabeza borradora" y "El hombre elefante" ya no lo habían hecho) como uno de los directores más importantes de su generación.

"Terciopelo azul" es en todo momento una suerte de ensayo de "Twin Peaks", la imprescindible y mítica serie que crearía para la televisión pocos años después y que le volvería a encumbrar. 

Los que la hayan visto lo saben. Ambas presentan un idílico pueblo de los Estados Unidos profundo, de avenidas bonitas y limpias, de casas con jardín, de vecinos aparentemente apacibles, en el que late algo oscuro. Ambas retratan las dos caras del bien y del mal y las dos caras del Sueño Americano. 

Lumberton, el pueblo en el que esta película tiene lugar, es a todos los efectos otro Twin Peaks. Hasta ambos lugares viven en gran parte de la industria de la madera. Incluso, tal vez a modo de homenaje, la serie repite el plano del camión cargado de dicha madera pasando frente al bar más famoso del pueblo a modo de transición. 

La película comienza con su inolvidable tema mientras la mencionada localidad de Lumberton es retratada con un lugar bucólico y apacible en el que los vecinos riegan el césped en mañanas tranquilas y los bomberos saludan casi tiernamente. 

Llega entonces el surrealismo, la maldad, la oscuridad: en un jardín aparece una oreja cortada. Puro David Lynch. Y a partir de aquí se desata el thriller.

"Terciopelo azul" es una fantástica obra maestra. Su ambientación es una gozada (enrarecida, extraña, nerviosa), y también sus diálogos, su humor freak (que también repetiría en la mencionada "Twin Peaks"), y por supuesto su trama, cargada de violencia y sexo, inteligente, retorcida y siempre interesante y llena de sorpresas. 

Los personajes, también freaks, son un prodigio de personalidad y carisma, y están maravillosamente interpretados (entre ellos destaca un Dennis Hopper verdaderamente atronador, terrible -terrible en el buen sentido-, que se come la pantalla y que da un mal rollo que pone los pelos de punta). 

Los demás no se quedan atrás de todas formas: desde el Kyle McLachlan recién llegado de "Dune" (y que sería uno de los protagonistas también de la una vez más necesariamente nombrable "Twin Peaks") hasta una inolvidable Isabella Rossellini y una no menos genial Laura Dern. 

Bienvenidos a la visión crítica y fantasmagórica del Sueño Americano de David Lynch. Bienvenidos a Lumberton, bienvenidos a Twin Peaks.

sábado, 24 de abril de 2021

PARA ESTE DÍA DEL LIBRO, OS INVITO A LEER MI NOVELA, IMAGEN CORPORATIVA

TE INVITO A LEER MI NOVELA POR EL DÍA DEL LIBRO 

Ayer fue el Día del Libro, y aunque en mi Twitter lo anuncié, aquí estaba terminando el ciclo de "Penny Dreadful". Así que hoy os propongo, para este fin de semana, leer mi novela "Imagen Corporativa". 

La edita Ediciones El Transbordador, ha tenido buenas críticas y muchas personas que me siguen la han leído ya y les ha gustado. 

Está en físico y en digital AQUÍ.

Y comparto, para completar, su página de Goodreads, donde ha cosechado excelentes comentarios: IMAGEN CORPORATIVA EN GOODREADS.

Feliz sábado de lecturas :)

viernes, 23 de abril de 2021

PENNY DREADFUL: CITY OF ANGELS. MEJOR QUE LA SERIE MADRE; TAMBIÉN CANCELADA


PENNY DREADFUL: CITY OF ANGELS de John Logan - 2020 - ("Penny Dreadful: City of Angels")

Hoy me toca dar otra opinión polémica. Vamos allá: "Penny Dreadful: City of Angels" me parece mucho, muchísimo mejor que "Penny Dreadful", su serie madre (la cual puse ayer a parir: pueden encontrar la reseña en esta misma etiqueta).

Aunque estén relacionadas por su nombre, las dos producciones no tienen nada que ver en realidad. Esta segunda se vendió como un spin-off, pero lo cierto es que no lo es: no hay ninguna conexión con la anterior más allá del mencionado nombre que ambas comparten.

Hay que decir que "Penny Dreadful: City of Angels" también fue cancelada. Tal vez sí que estaban planificadas estas conexiones. Tal vez algún personaje de aquella volvería (se me ocurre Dorian Gray, que es inmortal). El caso es que nos quedamos sin saberlo: como he dicho, todo se quedó en una temporada.

Y fue una lástima que esta fantástica serie no fuese más allá del pasado 2020, porque me parece del todo excelente, y además en todos los aspectos.

John Logan aquí sí crea una trama coherente, redondeada, bien desplegada y desarrollada, donde todos los personajes aportan su granito de arena al conjunto y están relacionados entre ellos. Todo lo que no hizo con la primera "Penny Dreadful".

Cambiamos de escenario, de ambientación, de género, de todo: nos vamos a finales de los años treinta y cambiamos Inglaterra por los Estados Unidos y nos instalamos en la ciudad de Los Angeles.

Y tenemos un "noir", y además de corte racial y con nazis de por medio. Thriller, historia, retrato político y social y asuntos como el racismo, la homofobia, el clasismo, la corrupción, la pobreza, la hipocresía, el fanatismo religioso, la violencia atávica de los USA o el ascenso de los totalitarismos en Europa sobre la mesa. Todo espléndidamente recreado.

Tenemos, además, grandísimos personajes. Maravillosamente interpretados y profundos, con aristas, con muchas, muchas aristas. Olvídense de todo maniqueísmo: el aparentemente más bueno de ellos puede cometer la cagada del siglo y el aparentemente más despreciable puede hacer algo inesperado y sorprendente.

"Penny Dreadful: City of Angels" no es una serie fácil. En absoluto. Aunque lo parezca. Expone muchos dilemas complicados, presenta muchos callejones sin salida. Nada es blanco y negro en nada. Como la vida misma.

Y tiene, además, un ritmazo. Y una trama de misterio que se sigue con interés. Y una ambientación esplendorosa y riquísima que recrea con belleza su convulso tiempo.

Existe el toque fantástico que la emparenta con su serie madre también. Creo que, en esta primera temporada por lo menos, era lo menos importante, valga la redundancia. Está ahí, pero lo cierto es que aporta bien poco y hasta se podría haber prescindido de él.

Como he dicho, "Penny Dreadful: City of Angels" fue cancelada y se quedó en lo que tenemos, en diez episodios nimios. No sabremos nunca, por desgracia, cómo acaba su historia y si finalmente tiene conexiones con "Penny Dreadful". En mi opinión, estamos ante una de las series recientes más maltratadas. Una verdadera lástima.

jueves, 22 de abril de 2021

PENNY DREADFUL. BELLÍSIMA Y CON CARISMA, PERO CON UNA TRAMA DESASTROSA

PENNY DREADFUL de John Logan - De 2014 a 2016 - ("Penny Dreadful")

Hoy me toca poner a parir uno de esos productos que, en general, es amado con pasión y que a mí no me gusta nada: "Penny Dreadful" (la primera serie, la original).

Creada por el escritor y guionista californiano John Logan, esta serie es un homenaje a la época victoriana inglesa y a muchos personajes literarios famosos de este momento. Su nombre hace referencia a las publicaciones llamadas de esta forma, que solían ser historias cortas en fascículos que se vendían por un penique (y que solían también ser del género terrorífico o de misterio).

"Penny Dreadful" tuvo un periplo muy accidentado que condicionó, especialmente, su tercera y última temporada. Según he leído, la audiencia nunca llegó a ser del todo buena con ella, a pesar de que la crítica sí. Esto hizo que tuviese que ser cerrada de forma apresurada. No se quedó a la mitad, aunque su desenlace es muy, muy discutible.

A mí no me convenció ya desde la segunda temporada, la cual me parece verdaderamente infumable. Creo que el guión de "Penny Dreadful" es malo. Está mal dispuesto, mal hilado, y en especial sus personajes están muy mal construidos, muy deslabazados y mal aprovechados.

Tenemos a un grupo de caracteres sacados de la literatura muy bien representados e interpretados con carisma por actrices y actores excelentes, tanto los protagonistas como los antagonistas. Tenemos un mundo victoriano mágico donde se relacionan. Sí, se parece todo mucho a "La Liga de los Caballeros Extraordinarios" de Alan Moore: de hecho, fue una de las críticas más sonadas que la serie cosechó en el momento de su salida.

No obstante, la idea es buena (y lo cierto es que hoy en día está ya todo inventado). Y además, visualmente la serie es maravillosa. Desde los escenarios a los vestidos pasando por la ambientación o las escenas de acción. Todo es rico, detallista, bello. Lástima que el guión no acompañe, como he dicho.

"Penny Dreadful" es errática. Muy errática. No sabe a dónde va, y esto ocurre ya casi desde la primera temporada, la más potable. Los personajes se relacionan titubeantes, los villanos tienen motivaciones poco definidas, y los giros de guión suelen ser, muchos, improvisados. 

Por otra parte, a la trama le cuesta avanzar. Y le cuesta una barbaridad. Se detiene y se detiene en momentos que la alargan y que aportan poco y no presta atención a otros que sí que son necesarios.

Este hecho se ve claro en el sinsentido total en el que están sus dos personajes más maltratados: el monstruo Frankenstein y Dorian Gray. Se pasan toda la serie (y cuando digo toda la serie es toda la serie) desgajados de los demás y, lo que es peor, sin avanzar prácticamente nada.

El primero está llorando por las esquinas en todos los capítulos. El segundo, follando con todo el mundo. Y fin. Intervienen poquísimo en la trama general y, lo que es peor, nadie repara en ellos para nada y nadie se da cuenta, ni los buenos ni los malos, de lo que tienen que aportar a ambos bandos (leches, que uno es casi invencible y el otro es directamente inmortal).

Pasan los capítulos y los dos siguen a su bola, y siguen a su bola, y siguen a su bola. Ni siquiera cuando la historia base se centra un poco en ellos entran en acción. No sé si estaba pensado que lo hiciesen y la cancelación de la serie frustró esto, pero, desde luego, su desarrollo va tan a cámara lenta si este es el caso que acaban siendo un pastiche en medio de una trama que ya de por sí tiene lagunas grandes.

Esto lo digo en lo referente a los personajes principales: si ya hablo de secundarios, la cosa es hasta peor. Lo que se hace con caracteres como Van Helsing o el doctor Jekyll directamente es de traca. No he visto concepciones y conclusiones referidas a ellos más lamentables en mucho tiempo: a personajes clásicos de la literatura mundial los tratan de la peor manera y los despachan de forma cutre, pero cutre, cutre. Esto es especialmente terrible.

Con respecto a las temporadas, la primera me parece la más potable y la segunda la peor con diferencia. La primera es una presentación: todo está fresco, todo interesa, y hay momentos excelentes (como el capítulo del doctor Frankenstein, que es una delicia y que tiene una sorpresa fantástica). 

Tiene fallos, y empieza a alargarse gratuitamente, y tiene algún momento patético (como lo que le hacen a Van Helsing) pero todavía se puede ver con agrado a pesar de todo y se presupone que sus errores son enigmas que van a ser resueltos en otras.

Luego, llega la segunda. Para mí, absolutamente intragable. Todo se detiene. Llegan villanas nuevas prometedoras que se quedan en casi nada. Empiezan tramas de amor que aportan poco. El monstruo Frankenstein sigue llorando por las esquinas y Dorian Gray sigue follando por las esquinas y siguen los dos a su bola y pasando de todo, a pesar de que a su alrededor ocurren cosas raras y chungas más que evidentes y que les implican. 

No avanza la trama. Todo es diálogo insulso, todo es drama alargado y a veces hasta gratuito, todo es "ahora vamos a por las malas, ahora no, y para el siguiente capítulo". Y así, llegamos al final, donde todo se resuelve a toda prisa (aunque por lo menos pasa algo: algo). Aquí, me costó seguir la serie, lo reconozco.

En la tercera sin embargo, que suele ser la más odiada, incluso por los fans, para mí mejora todo. ¿Por qué? Porque a pesar de su cancelación, hay cambios. Nos movemos. Los personajes evolucionan y entran otros nuevos que sirven para algo. Vamos de un escenario a otro y hasta salimos de Inglaterra. Entra por fin el villano que estábamos esperando.

Sí, definitivamente la tercera temporada me parece mucho, mucho más interesante que la segunda en todos los aspectos. Lástima que, como he señalado, es cerrada de golpe y de muy, muy malas maneras.

Todo acaba porque sí, de forma gratuita, y se quedan todas las subtramas abiertas, y casi todos los personajes abiertos, y casi todas las amenazas flotando en el aire. Se nota la cancelación, aunque se haya hecho un esfuerzo para cerrar la cosa de la mejor forma posible.

"Penny Dreadful" me parece una mala serie. Preciosa en lo visual pero desastrosa en lo argumental y hasta en lo narrativo. No sabe a dónde va casi nunca y tiene fallos de guión y de desarrollo de personajes garrafales. También tiene carisma, ojo, y algunos pocos capítulos excelentes. Pero en mi opinión, esto no la salva de la quema.

Mañana reseñaré "Penny Dreadful: City of Angels", una segunda serie que se hizo basada en ésta y que parece mucho, muchísimo mejor (por desgracia, también quedó cancelada, y esta vez tras una primera y única temporada).

miércoles, 21 de abril de 2021

SUPERMAN: HIJO ROJO. EL FASCINANTE SUPERMAN SOVIÉTICO DE MARK MILLAR

SUPERMAN: HIJO ROJO de Mark Millar, Dave Johnson y Kilian Plunkett - 2003 - ("Superman: Red Son")

Al británico Mark Millar se le ha acusado mucho, en los últimos años, de haberse apuntado al cómic más comercial e incluso de copiar fórmulas de otros autores de forma descarada para vivir de ello. Puede que algo de razón haya en todo esto.

Puede, también, que este autor se haya vuelto también excesivamente hiperactivo (pienso que saca demasiado y con demasiada rapidez y que eso muchas veces impide madurar en condiciones una obra).

No obstante, en su primera y mediana etapas pienso igualmente que tiene un buen puñado de creaciones tan originalísimas como maravillosas. Por ejemplo, en este mismo blog comenté hace unos cuantos meses "1985: El año de nuestra vida", que me parece una joyita. Y tengo por comentar otras cuantas como sus trabajos para "La Cosa del Pantano", "Los 4 Fantásticos", "Civil War" o sus obras independientes "Kick-Ass" o "The Secret Service".

Hoy, reseño uno de sus mejores cómics. Y no sólo esto: reseño uno de los mejores cómics de la década de los 2000: "Superman: Hijo Rojo".

Estamos en uno de los universos alternativos más originales y sugerentes que se han dado, pienso, en DC: el universo alternativo en el que Superman, en vez de caer en los Estados Unidos, cayó en la Unión Soviética.

Mark Millar entregó, a lo largo de mayo y julio de 2003, esta mini-serie increíble en la que, por medio del formato de un "Elseworld" tradicional, desarrollaba una fascinante alegoría sobre el poder en todas sus vertientes.

Pienso que este cómic, a pesar de ser corto, hay que disfrutarlo poco a poco. A sorbitos incluso. Sus tres números se saborean más leídos y madurados en días independientes que de una sola sentada.

Superman, una fuerza invencible y omnipresente, quiere mejorar al mundo. Hacerlo incluso un lugar perfecto. Es algo que llevamos viendo desde siempre, pero no en el contexto de la mencionada Unión Soviética.

Mark Millar se desvía de lo que en un principio parecía que iba a ser una simple alegoría política para ir más allá, hacia lo universal. Los temas de "Superman: Hijo Rojo" los hemos visto antes, pero rara vez con esta lucidez.

El eterno "¿Quién vigila a los vigilantes?" de "Watchmen", el también eterno "El fin no justifica los medios", la reflexión sobre las "dictaduras benignas" y sus devenires, la fina línea que hay entre los héroes y los villanos, el sacrificio de la libertad en pos de la seguridad, el libre albedrío de la humanidad y sus ventajas e inconvenientes... Todo está en la coctelera de esta inolvidable saga alternativa.

Montones de preguntas, de metáforas, de razonamientos interesantes nos asaltan mientras leemos este cómic único. Es sugerente, es sesudo, es irónico y atrapa desde la primera página. Y está, además, hecho con cariño y con amor de verdad por el personaje principal y por todo el universo de DC.

Porque "Superman: Hijo Rojo" no es una reformulación de Superman solamente: es una reformulación de todo su mencionado mundo. Sí, vamos a ver también aquí a sus villanos habituales. Y, por supuesto, a otros superhéroes famosos de la casa.

Todo articulado en una trama dinámica, ágil, divertida a la par que seria, llena de sentidos homenajes, de escenas para el recuerdo y de combates y momentos de acción fascinantes. Y, además, con un desenlace absolutamente magnífico, que da una vuelta de tuerca inesperada cuando ya no se esperaba más, valga la redundancia.

No puedo terminar la crítica sin hablar del arte de Kilian Plunkett y Dave Johnson: el dibujo de esta serie es una maravilla, y también el color de Paul Mounts. Juntos configuran un estilo visual que recuerda a viñetas soviéticas, a su fina y utilitaria concepción del arte, pero sin perder la esencia más típica del arte americano de DC.

"Superman: Hijo Rojo" es un cómic que hay que tener, pienso. Seas o no fans de los superhéroes. Porque va mucho, pero mucho más allá que una simple relectura de un personaje famoso de su género.

martes, 20 de abril de 2021

SLEEPY HOLLOW. EL TALENTO AMBIENTAL DE TIM BURTON BELLAMENTE DESBOCADO

SLEEPY HOLLOW de Tim Burton - 1999 - ("Sleepy Hollow")

Después de la interesante pero fallida "Mars Attacks!", Tim Burton se recuperó parcialmente (antes de volver a meter la pata hasta el fondo con su criticadísimo remake de "El Planeta de los Simios") con su magnifica versión de la historia de "Sleepy Hollow", en donde construyó otro de los mejores cuentos góticos de su carrera. 

Mixturando sin fisuras el thriller, el relato de terror y los toques tanto de aventura como de humor negro, el director gótico de Hollywood supo crear uno de sus mejores micromundos y una de sus más deliciosas galerías de personajes, interpretados con carisma por un reparto en el que destaca hasta el habitualmente terrible Casper Van Dien y encabezado por un divertidísimo Johnny Depp como Ichabod Crane que ya anticipaba aquí muchos de los "tics" de los papeles de "freaky" que ahora le acusan de repetir (y con cierta razón, este hombre es un gran actor pero un poquito sí que se está encasillando). 

Burton sabe desplegar y llevar a buen puerto perfectamente una trama negra que interesa desde el primer momento y que sorprende tanto en sus puntos clave como en su desenlace. 

El montaje, además, es dinámico y las escenas de acción son originales e imaginativas (la épica y enrevesada -en el buen sentido- batalla final es magnífica).

El "Sleepy Hollow" de Tim Burton es además, aparte de todo esto, una de las mejores maravillas visuales del director. 

El escenario de la obra, construido minuciosamente (hoy los efectos especiales pueden conseguir resultados similares mucho más baratos pero la falta del sentido del "tacto" se nota en las películas), es una absoluta delicia, tanto el pueblo como sus afueras (ese molino amenazante es genial) pasando por los interiores y los parajes naturales del oscuro bosque y sus claros. 

El talento escenográfico de Burton, ese que le hizo famoso en sus dos inolvidables aventuras de Batman o en "Eduardo Manostijeras", vuelve a aflorar aquí con todo su esplendor. "Sleepy Hollow" es una joyita del cine fantástico, sin duda.

lunes, 19 de abril de 2021

COPLAND. UN MAGISTRAL E INJUSTAMENTE OLVIDADO THRILLER SOCIAL

COPLAND de James Mangold - 1997 - ("Cop Land")

Tras la muy loable "Heavy", James Mangold entregó uno de los mejores thrillers sociales de la segunda mitad de los noventa, esta desgraciadamente algo olvidada "Copland", que presenta una clásica historia de integridad y justicia en la que el héroe urbano vuelve a ser el perdedor, que demuestra ante un mundo podrido que sus principios, de los que todos siempre se han burlado, pueden triunfar. 

Sylvester Stallone realiza uno de los mejores papeles de su carrera como este policía, papel que ha sido por desgracia eclipsado por otros más evidentemente famosos como los de Rocky (del que bebe un poco) o Rambo y también por la década de malos proyectos y de decadencia que el actor vivió tras esta "Copland" (con bodriazos como "Get Carter", "Driven", "T-Dox"y otras malas hierbas). 

Le acompañan unos excelentes Ray Liotta, Harvey Keitel, Robert De Niro, Robert Patrick (que la verdad borda a su capullísimo personaje), Michael Rappaport y Annabella Schiorra (el reparto es bastante apañado y cuenta con bastantes caras más que conocidas). 

Todos construyen a la perfección el horrible microcosmos podrido que late en la pequeña ciudad de Garrison, donde a las afueras de Nueva York los policías se han construido su propio feudo en el que se retiran de la vida estresante de la gran manzana y en el que también hacen lo que les da la gana con quien les da la gana.


"Copland"
trata como he señalado el asunto de la integridad y de cómo los que son tratados como mediocres son mejores personas y más valientes que los que les marginan y les desprecian y, también, el de la lucha contra la mencionada corrupción y el de la fidelidad a los propios ideales a toda costa y a pesar de grandes sacrificios. 

James Mangold lleva la trama, siempre interesante, con limpieza y fluidez, y crea algunos momentos verdaderamente geniales y cargados de tensión y de violencia explosiva (la cagada del policía de Rappaport, su huida tras la fiesta de policías y sobre todo el final del filme están magistralmente construidos) y otros intimistas también tremendamente logrados. 


Los diálogos son realistas y directos y el toque de western que la cinta guarda está perfectamente integrado. 

"Copland" es un thriller social con garra, fuerte y realista y también profundamente emotivo que creo que debería ser más tenido en cuenta y más recordado de lo que habitualmente es. En mi opinión, es éste uno de los mejores filmes dirigidos por James Mangold, un director que, normalmente, es capaz de hacer lo mejor y lo peor.