lunes, 31 de diciembre de 2018

FELIZ 2019 (Y MI CORRESPONDIENTE LISTA) :P


Se acaba 2018. Ha sido, para mi, un buen año. Una novela corta publicada, dos relatos publicados y uno que viene ya en camino. ¡Y una novela larga que estoy terminando!

Bienvenido, 2019. Un nuevo viaje comienza. :)

Y ahora, la lista obligada :P


MI LIBRO DEL AÑO: "La danza del gohut" de Ferrán Varela. Porque, mil veces lo repito y mil veces lo repetiré, es una de las historias de fantasía oscura que más me han marcado en mucho, mucho tiempo.

MI CÓMIC DEL AÑO: "Scalped" de Jason Aaron. Porque reúne lo mejor del buen thriller clásico y moderno, porque pone a parir a la sociedad de su momento, porque dibuja a unos personajes inolvidables y porque te marca a fuego para siempre.


MI SERIE DEL AÑO: "La maldición de Hill House". Porque tal vez no invente nada, ok, pero ha conseguido que el terror vuelva a ser algo hecho con cariño, con buenos personajes, con homenajes sentidos y, sobre todo, con sustos inteligentes y sugerentes.

MI PELÍCULA DEL AÑO: "Spiderman. Un nuevo universo". Porque me ha hecho volver a ser un niño. Lo juro. ¡Es amor!


MI DISCO DEL AÑO: El "bootleg" de Pearl Jam del Mad Cool. No solamente porque estuve allí y porque este disco ha sido uno de mis mejores regalos de esta Navidad, sino porque es uno de los mejores directos que he escuchado en mi vida. :)



HAPPY, HAPPY, HAPPY 2019 :)

jueves, 27 de diciembre de 2018

"DOS AMIGOS", DE EKAITZ ORTEGA, Y "CUANDO LAS CHUPETAS LLEGARON A NOMBELA", DE BEGOÑA PÉREZ RUIZ


El mes que viene, mi nuevo relato, "El caso planta carnívora", será el regalo que tendrán los miembros de la TRIPULACIÓN de la editorial El Transbordador. 

Estoy muy contento de tener este honor y quería hoy hablaros de los dos primeros cuentos que se han publicado en esta pequeña gran colección: "Dos amigos", de Ekaitz Ortega, y "Cuando las chupetas llegaron a Nombela", de Begoña Pérez Ruiz. 

Ambos me han sorprendido gratamente: ambos me parecen obras cortas mayúsculas. Porque a veces, aunque suene tópico, el arte de la narrativa breve, tan despreciado en algunos círculos todavía, es más complicado de redondear precisamente por eso: por ser breve, por estar atado a la concisión, a la "falta de medios" condicionada por el espacio. Y el buen cuento es algo maravilloso y complicado de terminar, es un barco construido dentro de una botella. ¡Hubo autores, como Borges, que solamente cultivaron este estilo!


"Dos amigos", de Ekaitz Ortega, es una historia de amistad que duele. Que pone los pelos de punta. Que nos coloca en esa línea tan terrible que existe entre lo maravilloso y lo cotidiano, entre el compromiso y el olvido, entre las ilusiones y las decepciones.

El autor de "Esta noche cruzamos el Ganges" nos lleva a un lugar emocional en el que todos hemos estado alguna vez, un lugar emocional de luces y sombras en el que la demoledora escala de grises que es toda vida nos atrapa y nos golpea con lucidez.

"Cuando las chupetas llegaron a Nombela", de Begoña Pérez Ruiz, es un cuento lleno de sorpresas. La creadora de "Azul, el poder de un hombre. Samidak", nos pone ante un kilómetro cero inquietante y a la vez entrañable para desgajarnos una historia en la que los giros de guión son constantes.

No sabemos dónde estamos, pero queremos saberlo desde el primer párrafo, y no podemos dejar de leer y de descubrir una sorpresa tras otra en un mundo inquietante, reconocible y a la vez mágico, con unos personajes que nos atrapan (en especial el pequeño y genial protagonista) y con un desenlace absolutamente fulminante.


Si te gusta la buena literatura breve y quieres apoyar un arte independiente, puedes unirte a esta tripulación. Recibirás en tu casa, cada mes, relatos como éstos y otros regalos.

Aquí te explican cómo hacerlo. 

Ayúdanos a apoyar un proyecto editorial diferente :)

¡Y gracias de antemano!

martes, 25 de diciembre de 2018

AQUAMAN. UNA ESPERANZA PARA EL UNIVERSO CINEMATOGRÁFICO DC


AQUAMAN de James Wan - 2018 - ("Aquaman")

"Aquaman" puede que no sea una maravilla, pero es, desde luego, lo mejor de DC en el cine desde "Wonder Woman". Sí, eso no es decir mucho, porque la franquicia muy bien en lo artístico no va, pero por lo menos aquí se observa un intento de cambio de rumbo.

Para empezar, el director es James Wan, que a veces es irregular pero que también nos ha dado películas muy, muy bien hechas como la primera "Saw", la primera "Insidious" o la primera "Expediente Warren"

Si DC quiere competir con los dos universos Marvel abiertos hasta ahora, tiene que apostar por realizadores con un mínimo de entidad, pienso.


Segundo, Jason Momoa está muy bien. Sabe dar vida a un superhéoe socarrón pero no ridículo, fuerte pero no soso. Y los secundarios también destacan. Y todos los personajes tienen un mínimo conflicto: se esquivan las luchas del bien contra el mal sin escalas de grises.

Tercero, la trama engancha desde el primer momento, y una película que dura dos horas y media se pasa en un vuelo. Hay peripecias frenéticas, dramas interesantes, humor canalla pero comedido, batallas muy bien rodadas y escenas de acción con carisma. Wan se mueve bien en los cambios de género, y aquí fue otro acierto contratarle.


Finalmente, hay que añadir que los diálogos son muy aceptables, que los conflictos están expuestos de forma simple pero también lógica (se critica el especismo y el supremacismo y se deja un mensaje ecologista) y que el mundo del personaje está muy bien retratado, respetando su esencia.

En conjunto, "Aquaman" es divertida, larga pero sin que le pese el metraje, interesante y digna. Como tantas películas de superhéroe en solitario (le pasa esto también mucho a Marvel), da para más, pero en este caso, y vistas la mayoría de las cintas previas de su universo, ésta nos da también muchas esperanzas de que las cosas en DC pueden empezar a ir, poco a poco, a mejor.


lunes, 24 de diciembre de 2018

FELIZ NAVIDAD :)


Feliz Navidad, people. Esta noche, coman y beban como si estuviesen en una Saturnal :)

¡Y luego, juerga! ¡Yeahhhh!!!!!!!! :)

domingo, 23 de diciembre de 2018

SPIDER-MAN: UN NUEVO UNIVERSO. LA MEJOR PELÍCULA DEL HOMBRE ARAÑA ES ANIMADA


SPIDER-MAN: UN NUEVO UNIVERSO de Bob Persichetti, Peter Ramsey y Rodney Rothman - 2018 - ("Spider-Man: Into the Spider-Verse")

De todo el disgusto que nos hemos llevado este año con "Venom", una aberración bochornosa hecha para pasar la gorra que ni siquiera pertenece a uno de los dos mundos cinematográficos de Marvel actualmente abiertos, nos resarcimos con "Spider-Man: Un nuevo universo".

Esta película, independiente de las continuidades también, es sin embargo una joyita. Anoche fui a verla, y me ató al asiento y ya no me moví hasta que terminó su escena post-créditos (no se la pierdan por nada del mundo). Se centra en el Spider-Verse y, siempre respetuosa, homenajea al hombre araña con cariño, sentimiento y buen hacer.


Miles Morales, uno de los Spider-Man más entrañables y queridos de la última hornada, tiene que salvar su mundo con la ayuda de otros tantos que son también dechados de carisma y que presentan caras posibles del mito de este personaje básico del cómic. Igualmente lo son los villanos y los secundarios (ningún personaje está descuidado, ninguno).

La estética es la perfecta: es un coherente collage de estilos e influencias que representan ese multiverso donde todo es posible y que bebe de la viñeta clásica, del "noir", del manga, de la parodia. Es una delicia para los sentidos disfrutar de esta película. De sus personajes, sus escenarios, su color (qué color), sus escenas de acción (frenéticas, imaginativas, llenas de potencia).


Y todo ello dentro de una trama que equilibra el humor (inteligente y fino, paródico sin resultar cansino), el drama (con momentos que ponen los pelos de punta) y la pura aventura y que nos habla de los asuntos de siempre que tanto gustan a los americanos (la superación sobre todo, pero también la amistad o la colaboración) pero sin hacer demagogias baratas de esas que también tanto gustan a los americanos.

"Spider-Man: Un nuevo universo" me ha conmovido, me ha divertido, me ha hecho reír y me ha hecho volver a la infancia. En serio, es una cinta maravillosa, de esas que son merecidamente de culto nada más estrenarse. La película de la Navidad y una de las películas del año.


sábado, 22 de diciembre de 2018

PERSÉPOLIS. EL CÓMIC Y LA PELÍCULA


“Persépolis”, el cómic y la película, narran la historia personal de Marjane Satrapi desde su infancia en su Irán natal hasta su exilio en Francia, en donde actualmente reside, tras haber pasado por Austria y haber retornado a Irán durante un tiempo.

Hija de intelectuales progresistas, la autora iraní, hoy uno de los nombres clave del cómic actual, vive, primero como niña y posteriormente como mujer, todos los cambios radicales que experimenta su país de origen durante la turbulenta última parte del siglo XX, cambios que se presentaron inicialmente en forma de promesas de un futuro de libertad e igualdad (tras la derrota del Sha) y que terminaron por desgracia en una dictadura aún peor que la del derrocado.


El cómic empezó a publicarse en el año 2000, y la película, que lo adapta con mucha fidelidad, es de 2007, y fue dirigida por la propia autora y por el realizador francés Vincent Paronnaud. 

Satrapi revisita en ambas obras la mencionada caída del Sha y la también mentada instauración del nuevo régimen pasando por la horrible Guerra entre Irán e Irak, y hace testigo al lector y al espectador de cómo su pueblo es reprimido sin cesar por las fuerzas de poderes integristas y también por las potencias exteriores, que intentan, de una manera u otra, manejar el país o hacerse con él.


La autora narra estos acontecimientos desde su propia visión haciendo gala tanto de un crudo dramatismo como de un delicioso y siempre irónico (y casi siempre brutalmente sulfúrico) sentido del humor, e incluso a veces muestra pequeños toques de surrealismo (impagables las conversaciones simultáneas de la protagonista con Dios y Marx).


“Persépolis” en sus dos formatos habla de los sueños perdidos, de la infancia destrozada, de los horrores de las guerras, de la lucha por la libertad, de la represión y del terrorismo de estado, de la manipulación por medio de la religión, del heroísmo de los que intentan nadar contra corriente y, sobre todo, de la asfixia a la que condenan las tradiciones absurdas a la autora y a los jóvenes de su tierra y, especialmente, a las mujeres, vistas como seres inferiores a los hombres y obligadas a esconder su cuerpo, a estudiar y trabajar en peores condiciones y a someterse a ellos en todos los aspectos.


Incluye además “Persépolis” una visión de Europa desde el punto de vista de una oriental tremendamente personal (la que sólo puede dar una joven exiliada casi por la fuerza) que lanza sagaces críticas dirigidas hacia el nihilismo reinante en estas tierras (que tuvo uno de sus grandes apogeos en los años ochenta con la eclosión del movimiento punk) y a la tremenda deshumanización del mundo consumista moderno que entonces no había llegado a Irán en todo su esplendor (a Satrapi le sorprende la soledad en la que se encuentran muchos europeos).

“Persépolis”, de estilo naif y preciso, es una obra maestra del cómic y una pequeña joyita del cine que conmueve, indigna y enseña y que abre puertas entre distintas culturas sin dejar de cuestionar a ambas ajeándose de todo maniqueísmo. Hoy tocaba hablar de esta autora imprescindible.


jueves, 20 de diciembre de 2018

PERDIDOS CON SPOILER. TEMPORADAS V & VI. "LA DECEPCIÓN"



QUINTA TEMPORADA

La quinta temporada marca el primer mal giro de "Perdidos". Por eso, tal vez, muchos fans han abandonado la serie en este punto (conozco bastantes). Los enigmas siguen llegando sin descanso y prácticamente la única respuesta a una pregunta importante del pasado de la isla que se da en toda la saga es la que hace referencia a la construcción del búnker que habitaba Desmond, la Estación del Cisne.

Para colmo hay que añadir unos horripilantes viajes en el tiempo (a mi por lo menos me parecieron fuera de lugar y no me gustaron nada de nada) que intentan disertar sobre la posibilidad o no de cambiar el destino y que terminan liando al personal de sobremanera y un retorno a la isla bastante chapucero y retorcido (retorcido porque no tiene explicación ninguna -en la sexta temporada, Charles Widmore llegará a la isla "tranquilamente" y de un día para otro-).


Por otro lado, y al igual que se hizo con los supervivientes de la cola del avión, los tripulantes "buenos" del Kahana son tirados vilmente a la basura. Charlotte no tiene apenas pasado más allá de Faraday, y muere de buenas a primeras y sin cerrarse, mientras que el mismo Faraday también termina siendo asesinado en un capítulo bastante chapucero para posteriormente ser casi olvidado, como ocurrió con Mr. Eko. Una pena que un personaje con un potencial tan grande y básico en la cuarta y quinta temporada termine tan tontamente.

Por otra parte Lapidus, aunque estará presente hasta el final de la serie, ni tiene flashbacks, ni pasado, ni motivaciones ni nada de nada, y la explicación de su retorno a la isla es de lo más cutre argumentalmente hablando visto en la serie.

Miles, que también estará presente hasta el desenlace, será el único que tendrá un cierto desarrollo interior, pero ni de lejos como el que tienen los protagonistas más clásicos. De hecho, una de las características esenciales de esta serie, los continuos viajes al pasado de sus personajes, viajes que les enriquecían tremendamente y sin cesar, apenas existen en los nuevos; un error mortal que termina faltando al espíritu de "Perdidos".


Por eso Charlotte, Lapidus o Miles y posteriormente Ilana (que aquí ya aparece esbozada) y Richard Alpert (que promete mucho pero que termina en casi nada) tienen tan poca entidad.

Por si fuera poco, y en otra muestra de desprecio total hacia los caracteres que se han ganado el cariño de los espectadores, Walt es sacado de mala manera de la serie con una excusa estupidísima y absurda.

El niño especial que querían los Otros, que se le aparecía a Locke para guiarle y que al parecer tenía poderes parecidos a los de Desmond (es lo que yo intuyo) termina en la basura y completamente olvidado (y no, que aparezca como protagonista en el epílogo de la serie no me vale, no). Un cero bien redondo para los guionistas.


La temporada finaliza con un desenlace espectacular (eso sí) pero el espectador tiene a estas alturas un cacao mental considerable y, entre tanto viaje al pasado y entre tanta carrera por la selva (las escenas de acción se presentan más numerosas y pierden entidad) y sobre todo entre tanta indignación por el maltrato de personajes (porque como han dicho tantas veces "Lost es una serie de personajes"), termina alejándose del maravilloso universo de esta isla que les cautivó en sus primeros arcos argumentales.

SEXTA TEMPORADA

Con la sexta y última temporada sobreviene el desastre de los desastres. El presupuesto parece achicarse de golpe (es increíble pero da toda la sensación de que ocurre) y el único escenario extra aparte de los naturales es un templo egipcio horroroso de cartón piedra (que estaba en la isla desde el principio pero que nadie había visto...), mientras que los hombres de Charles Widmore (que a estas alturas aparece en la isla como Pedro por su casa y de un día para otro) pasan de ser marines bien equipados a señores vestidos con pantalones vaqueros y camisas de cuadros.


Por otra parte, los tres personajes nuevos (Ilana viene de la quinta temporada pero se desarrolla aquí con todas sus consecuencias) de la función son ya pura carne de cañón y sus existencias no tienen ningún sentido desde el principio (Dogen es asesinado por Sayid porque sí, Zoe es insignificante y la mencionada Ilana... bueno, del final de Ilana mejor ni hablo porque me viene la rabia).

Mientras, Locke, Claire y el referido Sayid pierden totalmente sus identidades (¿Cómo han podido hacer esto con unos personajes tan queridos y presentes desde el primer capítulo de la serie? ¿Por qué este desprecio a los sentimientos del espectador?), Richard Alpert pasa de ser un señor seguro e inmutable a ser un pelele acojonado (y su personaje se queda sin explotar, y miren que tenía posibilidades) y Jacob y el Hombre de Negro no están sustentados en nada y da la total impresión de ser dos caracteres improvisados al final de la quinta temporada (¿Por qué tienen poderes contrapuestos? ¿Por qué los adquirieron? Inútil preguntárselo).

La trama, por otra parte, cae en picado y pierde calidad por los cuatro costados hasta llegar a ser un pastiche de acción y drama barato propio del peor producto hollywoodiense: ya todo son carreras por la selva de aquí para allá y alianzas y peleas sin sentido.


Todo es improvisado, todo se va inventando sobre la marcha, y lo demuestra ese combate de Jack contra el Hombre de Negro tan soso, esa muerte tan floja de Charles Widmore (señores... ¡Que es el segundo villano de la serie, que no puede morir a tontas y a locas!), esa difuminación de los propósitos reales del antagonista principal y de la clarividencia de Desmond, esa huida fracasada en submarino con esa explosión forzada por un Sayid que actúa de forma incoherente, esa "resurreción" de un Lapidus al que le ha caído una puerta de acero encima mientras se hundía en los mares, esa adhesión al falso Locke de los Otros del templo sin preguntas, ese escape final con despegue imposible, ese ir de una isla a otra en cinco minutos...


Por supuesto, hay algunas cosas buenas en esta temporada final (el capítulo "Dr. Linus" por ejemplo, o los reencuentros emotivos entre los personajes -como el de Hurley y Libby o Jin y Sun- o la traumática muerte de Juliet que enfrentará para siempre a Jack y a Sawyer), pero aparte de ser escasas, emocionan sólo y exclusivamente porque desatan sentimientos ya muy asentados y trabajados en una serie de seis temporadas (que muchos vieron durante seis años de fidelidad absoluta) y porque a los personajes ya se les tiene muchísimo cariño.

EL POLÉMICO FINAL

Y bueno, llega ya el momento de hablar del desenlace final de la serie, que a mi me parece un soberano bodrio.

Primeramente he de decir que el rollo de la realidad alternativa en el que los protagonistas se encuentran tras morir todos ellos (con ese horripilante encuentro en una iglesia en el que para colmo faltan la mitad de los personajes -y no me vale eso de que "no están preparados"-) me resulta propio de una mala película de fe y superación de Hollywood y se me antoja una pésima manera de resolver el desaguisado metafísico del inicio de esta última temporada, que trató de sorprender por la fuerza con dicha realidad alternativa.


Segundo: independientemente de que esta suerte de cielo exista o no, prácticamente todos los enigmas se quedan sin resolver. Casi todos. Y señoras y señores, esto es imperdonable. ¿Qué es la isla? ¿Qué es la Iniciativa Dharma? ¿Por qué los Otros eran tan malvados y sádicos en las tres primeras temporadas? ¿Por qué sólo se puede llegar a la isla siguiendo ciertas pautas? ¿Por qué se puede mover la isla usando una suerte de rueda congelada en sus profundidades?

 ¿Y qué hay de los viajes en el tiempo? ¿Y de los números de Hurley y su mala suerte? ¿Y por qué Libby estaba en el psiquiátrico de Hurley y le regaló su yate a Desmond? ¿Y por qué todos querían a Walt al principio y después pasan de él? ¿Y por qué Jacob y su hermano tienen poderes? ¿Y por qué hay teletransporte gratis a Túnez?


¿Y por qué mueren las embarazadas en la isla? ¿Y por qué la isla es un "tapon para que no escape la maldad"? ¿Y por qué Jacob no apareció antes? Y esto es sólo la punta del iceberg. Cientos y cientos de enigmas sin resolver tras seis años. ¿No han tenido tiempo de hilvanarlo todo bien? ¿O es que la empanada que los guionistas han montado es tal que no había manera de organizar nada a estas alturas? Una vergüenza. Eso es lo que es este final: una vergüenza.

Sin embargo, y a pesar de este despropósito último, "Perdidos" es en conjunto una serie muy apreciable que, por lo menos con sus dos primeras temporadas, marcó el inicio de un nuevo panorama en su estilo. ¿O no? ¿Qué piensan ustedes?


miércoles, 19 de diciembre de 2018

PERDIDOS CON SPOILER. TEMPORADAS III & IV. "LAS CHAPUZAS"


TERCERA TEMPORADA

Los primeros errores apreciables de "Perdidos" llegan con su tercera temporada, que comienza a atosigar al espectador con enigmas constantes en busca de golpes de efecto cada vez más abusivos y fáciles y en la cual comienza la "sangría de personajes" que va a caracterizar, por desgracia, a la trama a partir de ahora.

En el quinto capítulo de esta tercera temporada Mr. Eko abandona la serie de una forma vergonzosa en una chapuza de episodio que al parecer no gustó nada a los fans. Uno de los personajes con más potencial y carisma de "Lost" y básico en la segunda temporada es despachado de buenas a primeras y sin explicación ninguna.

Al parecer no fue culpa de los guionistas: Adewale Akinnuoye-Agbaje, el actor que le daba vida, abandonó el proyecto de un día para otro y les dejó colgados (y de hecho la cosa tuvo que acabar bastante mal entre él y el equipo, porque Eko es el único personaje que no aparecerá en ningún flashback -Hurley verá a su fantasma, pero fuera de plano, en la cuarta temporada-).


No es excusa de todas formas, pienso, para un final tan improvisado a este personaje, que, por otra parte, también podría haber sido sustituido por otro actor, ya que inicialmente iba a ser uno de los protagonistas absolutos (se ha hecho en "Spartacus" y nada más y nada menos que con el protagonista principal, ¿por qué no iba a funcionar aquí?).

Este mal sabor de boca para muchos fans y la triste sensación de que la trama de la cola del avión no sirvió para nada se llevó también, pienso, por delante a Nikki y a Paulo (Kiele Sánchez y Rodrigo Santoro), dos nuevos caracteres que, odiados por los seguidores de la serie nada más aparecer en un tramo bastante delicado para la audiencia de la temporada (sus seis primeros capítulos, centrados en el cautiverio de Jack, Kate y Sawyer y con la mencionada muerte de Mr. Eko de por medio no gustaron demasiado) fueron eliminados sin haber tenido apenas oportunidad de despegar en un curioso (curioso no quita el que sea chapucero) capítulo casi de cine negro.


Empiezan, por otra parte, las incongruencias argumentales: Hurley casi no está traumatizado por la muerte de Libby, y esto tendría que haber marcado a su personaje para toda la serie. Por otra parte, la facultad de Desmond para ver el futuro queda muy coja, ya que sólo predice la muerte de Charlie y ninguna más (y no será porque no mueren personajes en la serie).

No todos son puntos malos en esta tercera temporada, por supuesto: empieza la antológica rivalidad eterna entre Locke y Linus, la mencionada muerte de Charlie deja con un nudo en la garganta, los capítulos en los que Jack, Kate y Sawyer son prisioneros de los Otros son geniales (por lo menos para mi), la batalla contra estos Otros es un evento esperadísimo, el personaje de Juliet es muy carismático y complica el trío Jack-Kate-Sawyer, Desmond se termina de transformar en uno de los protagonistas absolutos con su apabullante carisma y, sobre todo, el desenlace del arco argumental deja, literalmente, con la boca abierta (puede que sea el mejor desenlace de temporada de toda la serie). El interés se mantiene pese a los fallos.


Por cierto que es aquí donde veo uno de los grandes patones de la serie: Juliet (de los Otros) y Desmond (relacionado con la Iniciativa Dharma) se unen a los supervivientes... ¡Y nadie les pregunta sobre los Otros y sobre la Iniciativa Dharma! ¿Estamos locos o qué? Este intento forzado de mantener el interés con calzador pasará factura en futuras temporadas a la coherencia de la serie.

CUARTA TEMPORADA

La cuarta temporada de "Perdidos", de apenas 13 episodios, mantiene también el nivel, aunque los defectos que aparecieron en la tercera se amplían y aquí además con la famosa huelga de guionistas norteamericanos de aquellos años presente.

Los enigmas llegan a ser ya agobiantes, y lo peor es que se llega peligrosamente a una quinta temporada sin haber solucionado prácticamente nada de las cuatro anteriores. No hay respuestas, casi ninguna, a nada relacionado con la isla o con los Otros o la Iniciativa Dharma, y sin embargo las preguntas no paran de llegar.


La sangría de personajes sigue además adelante, y esta vez los hechos son aún más tristes. Si la muerte de Mr. Eko era indignante, no lo es menos la de Rousseau, personaje clave despachado de mala manera (lo que habría dado un enfrentamiento entre ella y Linus por Alex... cuántas posibilidades tiradas vilmente a la basura) o la de la propia Alex, que si bien resulta traumática para el espectador (pocos se esperaban que Keamy le disparase a sangre fría ante los ojos de Ben), deja al personaje sin cerrar y también con muchas posibilidades sin explotar.

Sin embargo, lo más aberrante de la cuarta temporada (sí, digo aberrante con todas las letras) es lo que los guionistas hacen con el personaje de Michael, que tras una aparición estelar en el Kahana (genial el capítulo "Te presento a Kevin Johnson") también termina muriendo de una manera totalmente insignificante.

Es aberrante que el asesino de Ana Lucía y Libby termine así. Es una cutrada de las grandes, sobre todo porque fue uno de los protagonistas de las dos primeras temporadas y un personaje lleno de posibilidades (¿Cómo le recibirían los supervivientes tras su traición? ¿Cómo le recibiría Hurley? ¿Cómo continuaría la relación con su hijo Walt?). La redención de Michael es una chapuza de las grandes, y encima es incoherente, ya que si se redimió no podría aparecer en la sexta temporada como fantasma. Demencial.


Sin embargo, la cuarta temporada también tiene sus virtudes. Comienzan los "flashforwards" y el equilibrio entre lo que ocurre en la isla y fuera de ella está muy bien llevado. La trama es interesante y no decae, y existen momentos verdaderamente geniales como las luchas contra los hombres de Wildmore, el mencionado retorno "interrumpido" de Michael, las duras realidades de los retornados Oceanic Six, los capítulos dedicados a Desmond y a sus viajes metafísicos (genial "The Constant"), la profundización en el personaje de Ben y sus motivaciones, la supuesta muerte de Jin o ese giro final en el que la isla se mueve de su posición.

Los nuevos personajes son también tremendamente carismáticos: Faraday es uno de los mejores caracteres de la serie y ya lo demuestra, mientras que Charlotte, Miles y Lapidus llenan la pantalla sólo con su imagen. Por desgracia, como los de la cola del avión, van a ser completamente desperdiciados en las dos últimas temporadas (sólo Miles se salvará parcialmente de la quema).


martes, 18 de diciembre de 2018

PERDIDOS CON SPOILER. TEMPORADAS I & II. "LA MAGIA"


"Perdidos" va a ser posiblemente la serie norteamericana más popular y recordada de la pasada década, como "Twin Peaks" o "Expediente X" lo fueron para los ochenta o los noventa respectivamente. Y lo va a ser por diversos factores: ha sido la punta de lanza de la última revolución de las series, ha tenido seis años enganchado a más de medio mundo capítulo a capítulo, ha suscitado debates y teorías sin descanso y tiene un final que nunca va a dejar de desatar la polémica.

La serie estrella de J.J. Abrams, Damon Lindelof, Jeffrey Lieber y Carlton Cuse tiene todos los ingredientes para ser un clásico rotundo (bueno, ya lo es). Primeramente, siendo de aventuras y de ciencia ficción, toca muchísimos más palos: el homenaje a Robinson Crusoe, los fenómenos increíbles, los monstruos, las sectas, las conspiraciones, las predicciones del futuro, los viajes en el tiempo, los bucles temporales, las posibilidades de los "what if", los enigmas del Mundo Antiguo, la inmortalidad, la llegada del fin del mundo, los intercambios de cuerpos o los fantasmas y el más allá.


Por otra parte, sus personajes, de todos los continentes, tocan una gigantesca variedad de situaciones, frustraciones y conflictos vitales: relaciones de pareja, de amistad y paterno y materno-filiales; culpabilidad, lucha entre ciencia y fe, adicciones varias (drogas, alcohol y comida), soledad, complejos, locura, guerra, redención, avaricia y sed de poder, atracción entre hermanos, los fantasmas del éxito, diferentes conceptos de justicia, traumas infantiles, altruísmo, conflictos de liderazgo o la enterna lucha del bien contra el mal.

"Perdidos" es un compendio de los grandes temas de la ciencia ficción y de las historias fantásticas y también de una grandísima parte del drama humano universal. Por desgracia, la serie también va a pasar a la historia por tener uno de los desenlaces (y una de las temporadas finales) más polémicos: para muchos es perfecto, para otros es imperfecto pero coherente, para otros es solvente y para otros es un timo con todas las letras.


Mi opinión sobre el conjunto de la serie se sitúa en la línea intermedia: "Lost" tiene un comienzo espectacular, un ecuador que sabe mantener el interés (aunque empieza a ser invadido por las lagunas) y un desenlace bochornoso y del todo insatisfactorio. ¿Merece la pena? Pues creo que sí, porque creo que la mayor parte de la obra ofrece más cosas buenas que malas a pesar del horrible sabor de boca que deja su final.

Hoy, analizo sus dos primeras temporadas: las que, desde mi punto de vista, considero las mejores. Las mágicas. Las que nos marcaron y las que tenían los mejores personajes y las mejores incógnitas.

PRIMERA TEMPORADA

"Perdidos" comienza con uno de los mejores capítulos piloto de la historia. Para los anales ha quedado ese episodio doble con el brutal accidente de avión y con los primeros contactos entre unos personajes con un carisma apabullante. En la primera y genial temporada de la serie, la acción va a centrarse en desarrollar a estos personajes y sus vidas antes de la llegada a la isla y en presentar montones de enigmas que atraparán irremisiblemente al espectador (un monstruo asesino que nadie ve, extrañas sintonías de radio, susurros en la jungla, osos polares en un clima tropical, una escotilla cerrada a cal y canto en medio de la selva, una avioneta destrozada en un árbol, dos cadáveres que parecen ser casi prehistóricos...).


Jack, Kate, Sawyer, Locke, Sayid, Hurley, Charlie, Claire, Michael y Walt, Jin y Sun... Todos estos caracteres son ya míticos y, en la primera temporada, se ganan el cariño del espectador sin problemas. Por otra parte los Otros, los antagonistas de la función, al igual que el monstruo, no son mostrados (salvo en el inicialmente misterioso y breve personaje de Ethan), sino sugeridos, hasta el final de la propia temporada, que sólo incita a comenzar de inmediato con el primer capítulo de la segunda.

La narración es pausada y el equilibrio entre acción, introspección, drama y hasta comedia es perfecto. Los personajes están desarrollados hasta el más mínimo detalle, y los que menos aprovechados están (Boone y Shannon) tienen también un pasado que mostrar mínimamente interesante. La muerte del referido Boone por culpa de Locke crea el primer "trauma" de la serie y deja bien claro que cualquiera puede abandonarla en cualquier momento y de la manera menos esperada, poniendo en guardia al espectador.


Prácticamente lo único que se le puede achacar a esta temporada son los mencionados personajes de Boone y Shannon, mal explotados, ya que su relación daba para mucho y se quedó prácticamente en nada (el de Ian Sommerhalder es bastante soso y el primer interés que suscita es, tristemente, su inesperada muerte -básica para el devenir futuro de Locke-, mientras que el de Maggie Grace prometía tras este trauma como "lostie" que se haría fuerte en la serie pero, por desgracia, apenas pasaría de los primeros capítulos de la segunda temporada). Quitando esto, el inicio de "Perdidos" es perfecto y ya legendario.

SEGUNDA TEMPORADA

Criticada y tachada por algunos de repetitiva, la segunda temporada de la serie se me sigue antojando perfecta. Siguen los enigmas (más suposiciones sobre los Otros, el pie de la estatua rota con cuatro dedos, las "teclas del fin del mundo" en la escotilla, el origen de Desmond) bien dosificados y también siguen desarrollándose los personajes principales y redondeando sus identidades.


Por otra parte, se presentan a los viajeros de la cola del avión, un plantel de caracteres genial que, por desgracia, apenas pasaría de esta temporada. Se presenta también a uno de los grandes personajes de la serie, Benjamin Linus, cuya aparición es sencillamente estelar, y, finalmente, las muertes de Ana Lucía y Libby a manos del traidor Michael (que pasaría a ser uno de los protagonistas más odiados) suponen un auténtico e inesperadísimo "shock" para el espectador.

A pesar de ser, tal vez, demasiado larga y con algo de exceso de flashbacks, la segunda temporada de "Perdidos" resulta igual de cautivadora que la primera gracias a una historia muy equilibrada en todos sus elementos (acción, introspección y drama) y que avanza claramente al primer encuentro verdaderamente violento con los Otros que se dará en la tercera.


Como dije, los personajes de la cola del avión son una explosión de carisma que enriquecen el campamento de los supervivientes. Presentados en un capítulo apoteósico ("Los otros 48 dias") Ana Lucía viene a ser una suerte de Jack más violento, Mr. Eko un genial contrapunto de John Locke, Libby el complemento ideal e inesperado de Hurley y Bernard un secundario apreciable que desde este momento aparecerá de manera intermitente junto a su mujer Rose.

Queda además un último personaje por presentar: el querido por todos Desmond (uno de los caracteres más apreciados por los fans), que, aunque tendrá sus momentos dorados a partir de la tercera temporada, ya resulta también una bomba de carisma.


El único pero de la temporada viene con la muerte precipitada de Shannon, otro personaje que con Boone se queda sin desarrollar bien (por desgracia, a partir de ahora no van a ser los únicos), ya que sólo está justificada para introducir a los viajeros de la cola del avión con un conflicto que se podría haber colocado de otra forma.

Las muertes de Ana Lucía y Libby sí las veo, en cambio, más lógicas. La primera queda mucho mejor cerrada que Shannon (muchos más flashbacks y una despedida final de Mr. Eko en forma de fantasma) y la segunda deja de golpe a Hurley sin la que es probablemente la única mujer importante que ha habido en su vida. Fallos como el del precipitado final del personaje de Maggie Grace aparte, el segundo conjunto de capítulos de "Perdidos" es genial en todos los aspectos. Mañana, hablaré de la tercera y la cuarta temporadas.


lunes, 17 de diciembre de 2018

LLEGA MI NUEVO RELATO: "EL CASO PLANTA CARNÍVORA"


Se está terminando el año, y 2019 lo empiezo con buenas noticias: mi segundo relato tras la novela corta "Imagen Corporativa" y el cuento "Crímenes contra la humanidad" está ya en camino.

"El caso planta carnívora" se titula, y será publicado en enero por ediciones El Transbordador. Se trata de una historia de terror sobre el peso del pasado y sobre los restos venenosos que dejan las dictaduras cuando terminan.

¿Cómo la podéis conseguir?

Si os unís a LA TRIPULACIÓN de El Transbordador antes del 31/12/18 lo tendréis en el formato que más os guste desde 2 $ al mes :)

https://www.patreon.com/eltransbordador

Y esto no termina con esta novedad: hay muchas más ventajas y cada mes tendréis nuevas obras de nuevos autores, de todos los géneros y de todos los estilos. Ayudadnos a seguir creando arte independiente y disfrutadlo de primera mano como más os guste.

"El caso planta carnívora", en enero :)

¡Seguiremos informando!