viernes, 22 de marzo de 2024

LOVE HINA. UNA SITCOM QUE ENVEJECIÓ REGULAR PERO CON CARISMA Y ACIERTOS

LOVE HINA de Ken Akamatsu - De 1998 a 2001 - ("Rabu Hina")

Creo que la "sitcom" es, en todos los ámbitos y medios, el género que mejor retrata un momento social concreto y el que, debido a ello precisamente, envejece peor en años o en décadas posteriores. Les ha pasado a prácticamente a todas, incluso a las que en su momento eran vistas como muy avanzadas o "cool".

"Love Hina" se publicó entre 1998 y 2001 y es hija de su tiempo, como lo es "Friends" en la televisión, "American Pie" en el cine o "Video Girl AI" en el manga también. Tiene mensajes positivos (los tiene) y tiene una representación de relaciones entre sexos que se ha quedado en muchos aspectos muy anticuada y rancia (porque además estamos hablando de la sociedad de Japón de finales de los 90 y principios de los 2000, en muchos aspectos más cerrada que muchas occidentales en el mismo momento).

Ken Akamatsu, su autor, es uno de los mangakas más exitosos de su país y un experto en el llamado "ecchi", manga (o anime) en el que hay gran presencia de sexo sin llegar a ser "hentai" (que directamente es ya pornográfico). Esta "Love Hina" es su obra más famosa, y llegó a España a principios de los mencionados años 2000.

Estamos ante un "harem manga": un manga en el que un hombre vive por circunstancias habitualmente delirantes constantemente rodeado de mujeres (habitualmente guapas). En Japón tiene mucho éxito (y de hecho éste en concreto tuvo versión de anime, tres OVA y hasta dos novelas).

¿De qué va "Love Hina"? De un chico bastante patoso, guapo pero con gafas (un tópico de muchas comedias románticas para "afear" a sus personajes), que quiere entrar a estudiar a la Universidad de Tokyo por una promesa que hizo a un amor de infancia y que, mientras prepara el examen, tiene que vivir en una residencia de chicas donde la lía parda con su sola presencia.

Por supuesto, prácticamente todas estas chicas van a sentirse atraídas por él en algún momento y por supuesto hay una que le gusta más que el resto. Sí, "Love Hina" es predecible, y la verdad es que, sobre todo en los primeros tomos, te la sabes de memoria. 

Ahora bien, en los últimos, todo hay que decirlo, el manga se vuelve muy delirante y gana bastante cuando sale de la historia de amor básica y se pone su autor a homenajear a otros géneros.

Ken Akamatsu empieza "Love Hina" de una forma bastante convencional, con bromas y chistes clásicos de la comedia romántica (habitualmente malentendidos que dejan al protagonista como un pervertido para que sus compañeras le zurren), pero luego de repente la cotidianeidad del día a día se va deformando y encontramos desde aventuras en islas perdidas a viajes a ruinas a lo Indiana Jones pasando por luchas de samuráis, animales con inteligencia humana o, directamente, desquiciadas batallas con naves voladoras. Sí, el manga es muy sorprendente en este aspecto y trasciende su propio género para encontrar su propia voz. Y esto lo salva.

"Love Hina", dentro de lo tópico de su propuesta inicial, sabe salir de ella poco a poco y aportar algo nuevo. También hay que decir que sus personajes, al empezar bastante gruesos, van tomando carisma y van desarrollando una química verdaderamente efectiva y que funciona. Estamos ante un cómic que, sin inventar nada, va de menos a más y consigue aportar algo más, valga la redundancia, que un romance juvenil de usar y tirar.

En la parte mala está lo mal que ha envejecido (de hecho, hay cosas que en su propia época ya cantaban, porque en los años 2000 en occidente ya se habían roto muchos techos que tal vez en Japón aún no, por lo que se da a entender por lo menos en esta trama). "Love Hina" tiene bastantes escenas y convencionalismos machistas, y la relación entre el sexo masculino y el femenino se mueve a base de mecanismos que condenan a uno y a otro a hacer papeles tóxicos e injustos designados de serie que nadie cuestiona en ningún momento.

Por otra parte, también hay que decir que el cómic sí que se burla bastante del represivo sistema estudiantil japonés: la obsesión por acceder a universidades de prestigio (el autor intentó en su juventud entrar en la de Tokyo sin éxito) es satirizada y llega un momento en el que una vida más auténtica, con estudios o profesiones elegidas en función de algo más que la presión o la inercia social, quedan muy por encima. En este sentido, sí es avanzada a otros mangas de su época.

"Love Hina " es una obra producto de su tiempo para bien y para mal y, como tantas "sitcom", pone unas losas en las que se asientan avances sociales pioneros mientras que a la vez no cuestiona e incluso se recrea en cuestiones rancias que debían empezar entonces a criticarse. Lo mismo que le pasa a otras obras de su estilo en todo el mundo. Con todo esto, en Japón es un clásico total de la comedia romántica y en España funcionó bien. Hoy, no lo sé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario