lunes, 7 de octubre de 2019

JOKER. EL PRIMER Y ESPLÉNDIDO "ENSEWORLD" CINEMATOGRÁFICO DE DC


JOKER de Todd Phillips - 2019 - ("Joker")

Uno de los grandes placeres de leer cómics de personajes de franquicias es que, según el autor que lo trate, dichos personajes tienen un toque u otro. A veces, mantienen su esencia. A veces, no. Y esto último no tiene por qué ser necesariamente algo malo.

En los mundos de Marvel y de DC son muy comunes los "What if?", los universos paralelos que, fuera de la continuidad oficial, permiten explorar a los personajes de estas grandes sagas desde un nuevo origen o desde una nueva perspectiva.


Así, hemos tenido a un Superman que en vez de caer siendo un bebé en los USA lo hacía en la Unión Soviética en "Superman. Hijo Rojo", de Mark Millar, o a un Batman que vive en 1889 en "Gotham: Luz de Gas" de Mike Mignola y Brian Augustyn o a un Punisher que deshace entuertos en nuestro mundo real en "Punisher MAX" de Garth Ennis.

Este concepto ha llegado ahora a DC en el cine con esta "Joker", que, desgajada del actualmente abierto pero tambaleante universo de la compañía, presenta el origen de un nuevo payaso asesino que ha estado interpretado maravillosamente por Joaquin Phoenix.

Esta crítica tiene spoilers. Lo aviso desde el título. Porque me parece muy difícil escribir algo medianamente coherente sobre esta película sin desvelar elementos de su trama.


"Joker" no es Batman. Tampoco es Joker, valga la redundancia. Al payaso psicópata se le da un nombre, se le da un origen, y se le da una vida anterior a su vida de muerte y caos. Y no tiene nada que ver con el de Bill Finger y ni siquiera con el de Alan Moore.

Este Joker parece vivir en una Gotham alternativa, con reminiscencias de décadas como las de los ochenta y los noventa, donde hay una crisis económica galopante y donde la familia Wayne y los políticos son unos ricos bastante hijos de puta, con todas las letras.


Es una ucronía, un reinicio aparte de todo lo que hemos conocido hasta ahora en el cine, y esto le da libertad a Todd Phillips (que por cierto hasta ahora solo había dirigido comedietas mediocres) y a su guionista Scott Silver para innovar con el personaje y su contexto.

"Joker" es una suerte de "Batman Begins" invertido. Gotham echa a andar pero desde la perspectiva de su villano, y Bruce Wayne, niño, es un secundario muy secundario que también queda explicado por las desventuras del que será su peor enemigo.

Las referencias a la crisis económica que hemos vivido en la última década están clarísimas, aunque también hay muchas a las políticas neoliberales que se aplicaron en otros decenios anteriores y que convierten a países como los Estados Unidos en auténticos infiernos para los más pobres.


El futuro Joker es una víctima del sistema aquí. Es un auténtico pringado que vive casi en la miseria, sin ayuda médica, sin ayuda social de ninguna clase, incomprendido, con la mente destrozada. No es el Joker, ni de lejos. Pero de esto tratan los "What if?": de experimentar, toquetear y cambiar cosas.

Todd Phillips nos lleva por una angustiosa espiral de degradación totalmente coherente y demencial que no dista mucho de la que podría vivir cualquier ciudadano medio abocado a la pobreza y al abandono. Sí, tiene mucho de "Taxi Driver". Es cierto.


Y esta espiral de degradación tiene consecuencias. Y una sucesión de climax brutales. Y violencia, e ira. Y mucha, mucha ambigüedad. Porque las situaciones como estas nos llevan a un eterno claroscuro donde nada es de un solo color y que Phillips ha sabido retratar perfectamente.

Las opiniones sobre este Joker son diversas. Para unos, es un héroe del pueblo. Para otros, un peligro. Para otros, un infeliz desquiciado. El debate está servido, y eso es maravilloso. Porque la génesis de este villano, reinterpretada aquí, dice mucho sobre la persona de nuestros días acosada por el capitalismo más agresivo.


Me resulta curioso que "Joker" haya tenido interpretaciones muy similares tanto por parte de personas que conozco de izquierdas como de derechas. Suscita reacciones viscerales en un clima político de populismos de todo pelaje, de guerra cultural dogmática y sin prisioneros.

Todo esto resulta aún más estimulante gracias a un personaje perfectamente construido, a unos secundarios con carisma, a unos diálogos deliciosos, a una ambientación preciosa con una fotografía preciosa (y un toque clásico que le viene como anillo al dedo) que, sin embargo, también tiene reminiscencias de los Batman de Nolan (especialmente, en su realismo sucio y en su banda sonora).


Joaquin Phoenix está inolvidable. Absolutamente soberbio. Directo para la lista de las grandes interpretaciones de este personaje (y el nivel está alto, vaya que sí). Este papel será uno de los grandísimos de su carrera.

"Joker" es un reto. Para los amantes del cine de superhéroes y para los que no lo son. Para las personas de todas las cuerdas políticas. Es inteligente, sugestiva, violenta, deprimente y con pocas, muy pocas concesiones para tratarse de un producto "comercial" (noten las comillas).


Para mi, es una de las películas de este año que ya se encamina a su recta final. Y me hace pensar que DC funciona mucho mejor, o por lo menos ha sido así hasta ahora, con películas de personajes individuales que con universos compartidos.

¿Volveremos a ver a este Joker en un futuro? Parece que esta cinta será totalmente independiente, pero dado su éxito y los rumores de cancelación del actual Universo Cinematográfico DC, del que ya se han largado varios actores importantes y que no termina de encontrar un punto medio de calidad, puede que termine siendo el pistoletazo de salida de ese nuevo Batman que está en camino. Lo veremos en estos años.


2 comentarios:

  1. Bueno yo soy d elos pocos al que este film le ha dejado algo frío. Me parece cargante en algunos aspectos la interpretación de Phoenix, y el director me parece que se recrea en exceso en algunas secuencias, incluso algo pedante diría yo. Con todo tiene muchas cosas buenas, pero el resultado final es agridulce para mi 6/10.....y sí, esto huele a trilogía.
    Un saludo

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  2. Con escuadrón suicida de verdad pensé que DC nunca volvería a hacer algo decente. Muy de acuerdo en tu lectura. 8/10

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