lunes, 11 de abril de 2022

DEADPOOL. UN SOPLO DE AIRE FRESCO DESCEREBRADO EN LA SAGA X-MEN

DEADPOOL de Tim Miller - 2016 - ("Deadpool")

El que no corre vuela, y con tres franquicias de superhéroes diferentes en 2016 (Universo Marvel, Universo X-Men y Universo DC) peleándose a guantazo en limpio en las carteleras, había que explotar a lo bestia la gallina de los huevos de oro. Y oigan, si se hace bien, tampoco importa, ¿no?

Deadpool (Masacre en España durante mucho tiempo) fue creado en 1991 como una alternativa a tanto superhéroe heróico, valga la redundancia. Era un antihéroe y un mercenario y sus cómics eran violentos y malhablados.

Y bueno, como este personaje aparecía ya en la primera película en solitario de Lobezno y como ha estado bastante ligado a los X-Men, pues se aprovecharon de ello y sacaron su película propia, dirigida por el entonces debutante Tim Miller. 

Y bueno, de nuevo: hay que decir que el filme cumple bastante bien. No es una maravilla, pero es desde luego un soplo de aire fresco entre tanto conflicto mundial épico y, situada entre "X-Men. Días del futuro pasado" y "X-Men. Apocalypse", viene bien como una suerte de tentenpié con refresco.

Deadpool, de nuevo interpretado por Ryan Reynolds, es eso, un antihéroe que dice muchas palabrotas, que es un cínico y que mata a lo bruto desmembrando a quien haga falta desmembrar. El filme tiene un tono cómico en todo momento, y también muy negro y desmitificador, e incluso los X-Men que aparecen en él como secundarios (Coloso y Negasonic Teenage Warhead) se lo toman todo con bastante cachondeo. Funciona.


Aunque hay lugar para la esperable historia de amor y para otra de venganza, "Deadpool" es un filme desenfadado, chorra, con muchos chistes de culos, tetas y pollas, con fanfarronería consciente y con frases lapidarias enrolladas.

Es además más violento que sus otros compañeros de producción, tanto de la franquicia de los X-Men como del Universo Cinematográfico de Marvel y del de DC. Aquí se destripan malos, vuelvan cabezas, vuelvan miembros y hay aplastamientos y sangre por todas partes.

Sí, es un soplo de aire fresco total, por eso tal vez haya funcionado tan bien, porque aunque nos gusten, los amantes de los cómics estábamos por aquel 2016 un poco saturados de batallas heróicas por la humanidad. Con pretensiones cero, y gracias, "Deadpool" cumple de sobra y no va de otra cosa. Eso sí, no puedo decir lo mismo de su horrenda y cansina segunda parte, pero de ella ya hablaré cuando me toque comentarla.


PD. Para variar, los guionistas se han pasado por el forro el hecho de que el personaje ya apareciese en el primer filme de Lobezno y le han dado otra historia y otro origen.

En fin, aquella película no era precisamente una maravilla, pero esto lo podían cuidar un poco más, porque queda bastante cutre hacer un "crossover" gigante y que en este "crossover" haya incongruencias por todas partes (y es que le sumamos que también cambiaban el papel de Dientes de Sable con respecto a la primera "X-Men"). Para algunos no tiene importancia, y tal vez soy yo muy pejiguero, pero lo cierto es que con esas cosas queda la saga muy poco seria.

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