lunes, 31 de agosto de 2020

COLOR OUT OF SPACE. UN LOVECRAFT ACTUALIZADO Y DE AURA PULP

El sudafricano Richard Stanley dirigió, a principios de los años noventa, dos curiosas y apreciables (y también de culto por sus rarezas) películas de fantasía y terror: "Hardware, programado para matar" y "El demonio del desierto".

Posteriormente, se ha prodigado en diversos trabajos documentales y en cortometrajes a lo largo de las siguientes décadas, hasta que ha retornado a la ficción grande con la adaptación del relato de H.P. Lovecraft "El color que vino del espacio".

Este tipo de adaptaciones suelen traer consigo una polémica, ya que autores como Lovecraft tienen legiones de seguidores que van a mirarlas con lupa.

"Color out of Space" no es igual que el relato original. Lo digo desde ya. También creo que es muy difícil que lo sea. No solamente porque dicho relato fue escrito por el autor en 1927, sino porque, y aún siendo éste bastante más largo que otros relatos suyos, el material para llevarlo a un metraje de dos horas no da, simplemente.

Creo que Stanley respeta la esencia del creador de Providence: ambiente apartado, mundo extraño, personajes comunes enfrentados a algo terrorífico que no comprenden y desenlace sorprendente. 

Sí que ha operado cambios en el terror sugerente y elegante de Lovecraft: aquí todo es más descaradamente pulp, de ambientación esplendorosa y rosada, más abiertamente violento e incluso "kitsch". Todo ello es conscientemente buscado.

También los personajes están adecuados a nuestros días, ya que la película no se ambienta en los años veinte. Son, posiblemente, concesiones que hay que hacer para sacar adelante este tipo de producción, que además vendrá con una presión extra por pertenecer a uno de los géneros más comerciales y devaluados de hoy: el terror.

Entre sus virtudes, "Color out of Space" tiene una visualidad cuidada, unos sustos y un horror cuidados (y dosificados en un "in crescendo" notable de sangre y vísceras), un reparto muy acertado (todos, desde Nicholas Cage hasta Madeleine Arthur, entregan papeles más que solventes) y un ritmo bien llevado.

Entre sus defectos, hay que decir que llega un momento, cercano al final de la película, en el que todo se estanca ligeramente para solucionarlo todo de golpe, valga la redundancia, con carreras por pasillos oscuros y personajes haciendo cosas absurdas para acabar de tonta carne de cañón.

El desenlace tampoco me termina de cuadrar. Sugiere que habrá más películas conectadas con esta en un gigantesco universo de seres de Lovecraft, lo cual en este caso concreto le quita poder de sugerencia (aunque esto no es otra cosa que la moda que ha establecido Marvel en el cine y que tantos están copiando, por otra parte). 

"Color out of Space" es terror digno, en general, con sus fallos y con sus aciertos, y con eso me quedo positivamente. Se ve bien y destaca en un género que, como he dicho, está muy devaluado y lleno de bodrios.


No hay comentarios:

Publicar un comentario