Escritor. Creador de la tira cómica "Coaching para esclavos". Cinéfilo, melómano y superdotado con TDAH. Hablo por aquí de películas, series, libros o cómics que me gustan. También estoy en Twitter (@torres_criado), en IG (josetorrescriado) y en Bluesky (@josetorrescriado.bsky.social).
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lunes, 6 de julio de 2020
EL MOTORISTA FANTASMA EN EL CINE. PRIMERA ENTREGA: BODRIO INFUMABLE NÚMERO I
Puede haber películas fallidas, que no salieron como se esperaba que saliesen. Puede haber películas con un buen guión y un director mediocre o malo y viceversa. Es comprensible.
Hacer cine es dificil y muchos elementos diferentes convergen en una obra en la que participan muchas, muchas manos.
Lo que ya no es normal es que el producto se enfoque mal desde un primer momento y que, con un descaro y un sinvergonzerío sin par, dicho producto sea una chapuza hecha en cinco minutos (como quien dice) destinada a sablear a la taquilla con su simple imagen y fama y adiós muy buenas.
"El Motorista Fantasma" es otro de esos personajes del mundo de Marvel que ha sido vilmente vilipendiado en el cine (en la serie del UCM "Agentes de S.H.I.E.L.D" parece que le dieron un poquito más de dignidad).
Nicholas Cage tenía muchas ganas de interpretarlo porque según decía era muy fan de los cómics en los que se basa, pero parece todo lo contrario. Claro que a lo mejor no es culpa suya. Porque esta porquería por tener no tiene ni ganas de ser "algo".
En 2007 la tendencia del cine de superhéroes, que hasta entonces hacía sido bastante malo en líneas generales, estaba cambiando. "Batman Begins" fue un antes y un después, y ya al año siguiente iba a comenzar con "Ironman" el mencionado Universo Cinematográfico de Marvel.
Esta película, sin embargo, pertenece todavía a esa vieja hornada donde quedaron olvidadas bazofias como "Daredevil", "Elektra", las dos entregas de los 2000 de "Los 4 Fantásticos", "X-Men III: La decisión final", "Spider-Man III" o, en DC, "Linterna Verde".
Mark Steven Johnson ya perpetró la basura de "Daredevil" y aquí vuelve a entregar otro bodrio. Su dirección es torpe y el guión de la obra es burdo, con una trama lineal en el peor de los sentidos, con diálogos horrendos, con personajes ridículos y desperdiciados, con actores desganados conscientes de que hacen el tonto y con escenas de acción sosas y aburridas.
"El Motorista Fantasma" es un despropósito conscientemente mal hecho, realizado sin interés por gente loca por "fichar y largarse" (cuánto habrán tardado en escribir su argumento no me lo quiero ni preguntar) porque saben perfectamente que, por tratarse de un personaje de la casa de Marvel, va a tener su público sí o sí (el mismo que escribe esta crítica, lo reconozco) y algo recaudará (total, para lo que ha costado... que no creo que sea mucho ni en esfuerzo ni tampoco en dinero a juzgar por sus decorados malos y sus efectos especiales discretitos).
La tendencia por suerte cambiaba ya poco a poco. Pero este Motorista Fantasma de Nicholas Cage todavía tuvo la cara de volver en una segunda entrega que era todavía peor. De esa cosa innombrable hablaré mañana.
viernes, 19 de junio de 2020
DAREDEVIL ANTES DEL UCM: OTRA PELÍCULA PUERIL MÁS DE LA DÉCADA DEL 2000
Daredevil fue uno de los desafortunados de la lista de superhéroes de la década de los 2000 que fue maltratado en su película de entonces, antes de que comenzasen los universos compartidos.
Este personaje, al igual que Batman, Punisher, El Motorista Fantasma o algunos de los atormentados X-Men, pertenece a esa estirpe de superhéroes más oscuros y violentos que, bien tratados, dan tanto juego.
Bien tratados, claro, porque Mark Steven Johnson, el director de esta bazofia (que por cierto también es el de la horrenda primera parte del mencionado "El Motorista Fantasma") no se tomó en serio al personaje desde el propio punto de partida y entregó una porquería pueril y cutre.
Ben Affleck nunca me pareció un mal actor, pero no da juego como Daredevil porque parece demasiado cándido en todo momento para interpretar a este personaje, que por cierto en la película es planísimo, y Jennifer Garner tampoco impone presencia como su compañera Elektra: también le falta más dureza y también es planísima.
Los dos villanos de la función siguen la línea: son "malos porque sí" (es decir, tan planos como los protagonistas) y, además, no se parecen demasiado a los del cómic en el que la película se basa.
El Bullseye de Colin Farrell es absolutamente horroroso (Farrell también es un buen actor, pero aquí está verdaderamente desganado y horrible, el peor de la función con diferencia) y no tiene ninguna química con el protagonista siendo su enemigo mortal, lo que es imperdonable (tampoco le favorecen las escenas cómicas insertadas a la fuerza que terminan de convertirlo en un personajillo ridículo).
Mientras, el Kingpin del fallecido Michael Clarke Duncan es el único que se salva un poco de la quema, pero no levanta el conjunto porque su personaje sigue siendo muy flojo, como el resto.
Y bueno, la historia es tan plana y predecible como todos estos personajes: hay una introducción de la vida del héroe, hay un romance, hay un toquecito de humor amable, hay una venganza, hay un combate final... Y todo sosísimo, sin ritmo, sustentado en una acción aburrida sin golpes buenos y en unos diálogos bastante penosos, en muchas acrobacias gratuitas pero tópicas y en un desarrollo nulo de todos los caracteres.
"Daredevil" es un desastre que trajo un spin-off del personaje de Elektra que es todavía peor (y que comentaré mañana). Por suerte, su retorno, ya como parte de las series del Universo Cinematográfico de Marvel, le devolvió la dignidad que siempre mereció.
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