lunes, 26 de agosto de 2024

LA CASA DEL DRAGÓN. UNA NUEVA TEMPORADA CONTINUISTA CON LO BUENO DE LA SERIE

LA CASA DEL DRAGÓN de George R.R. Martin y Ryan Condal - De 2022 a 2024 - ("House of the Dragon")

A la segunda temporada de "La Casa del Dragón" solamente le puedo poner un "pero": que es prácticamente en todo momento un prólogo para la tercera. No soy el único que ha comentado esto por las redes recientemente: pienso que le hace falta un "momento estrella", un giro impactante y clave que le de además su personalidad como temporada independiente.

Nos pasamos casi todos los capítulos esperando a que estalle algo y esto no va a ocurrir por lo menos hasta la siguiente colección de capítulos, valga la redundancia. No es algo malo necesariamente no obstante, y esta serie, y ya lo vimos en la temporada anterior, es una serie que busca en todo momento cocerse a fuego lento. Pero sí que creo que esto la impide brillar tantísimo como a la anterior.

Dejamos la trama donde se quedó y ahora el enfrentamiento por el reino está ya totalmente encarnizado y dando sus primeros horrores, aunque la guerra abierta en sí todavía no ha estallado.

Volvemos a tener lo que tuvimos en la primera parte de la serie: una lucha palaciega por el poder centrada más en la pura conspiración y en los tejemanejes políticos que en la acción, al contrario de lo que ocurría en "Juego de Tronos", que combinaba más ambas vertientes, y un retrato geopolítico de una Edad Media ficticia y fantástica de corte europeo que hace referencia directa a nuestra historia real y que vuelve a ser un tratado de la mencionada geopolítca donde podemos encontrar muchas realidades que no son ficticias retratadas. 

Éste ha sido desde siempre uno de los grandes valores de la obra de George R.R. Martin, incluso desde sus novelas y relatos que no son del mundo de "Canción de Hielo y Fuego": podemos encontrar estos temas en creaciones fantásticas como "Sueño del Fevre" o "Refugio del viento" (escrito junto a Lisa Tuttle) o en su novela corta "Los reyes de la arena".

Los personajes siguen evolucionando en esta temporada y, en este aspecto, creo que es en lo que más sorprende el nuevo segmento: si en la primera todos, prácticamente todos, eran caracteres grises, la mayoría interesados, muchísimos viles o directamente sanguinarios y monstruosos, aquí asistimos a un cambio en bastantes de ellos, que se muestran sorprendentemente ante crudos dilemas morales y ante cambios de conciencia inesperados. 

Un acierto total y absoluto este retrato y esta evolución de caracteres, que los humaniza y los hace más creíbles que nunca, porque todo el mundo tiene luces y sombras y todo el mundo es capaz de lo peor y también de lo mejor. Amén de que las interpretaciones del reparto siguen siendo espectaculares.

La temporada mantiene además el tono más sombrío y crudo (todavía más) que el de "Juego de Tronos": es sucia, sangrienta, sádica por momentos, y representa perfectamente esa Edad Media de esplendor y también de auténtica cutrería, de palacios imponentes y de ciudades llenas de porquería, de banquetes apetitosos y de auténticas bazofias en las mesas de la gente más pobre. 

Y el aspecto visual de todo vuelve a ser riquísimo y cuidadísimo hasta el detalle: es una absoluta delicia observar tanto los exteriores como los interiores. Además, los efectos especiales vuelven a cumplir de sobra (especialmente en el tema de los dragones).

La segunda temporada de "La Casa del Dragón", dejando a un lado lo que he comentado al inicio, me parece igual de buena que la primera y una gran seguidora de su legado. Muchas ganas de ver cómo se ubica la tercera.

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