martes, 28 de noviembre de 2023

PLEASANTVILLE. ORIGINAL, LLENA DE LECTURAS LÚCIDAS Y VISUALMENTE PRECIOSA

PLEASANTVILLE de Gary Ross - 1998 - ("Pleasantville")

Innovar en lo que se refiere a las clásicas historias de inconformismo y de héroes cotidianos que se rebelan contra una sociedad intransigente o beata es bastante difícil, pienso. Dicen que está todo hecho en casi todos los géneros. Bueno, pues en 1998 Gary Ross innovó de sobra en este aspecto en su debut en el cine, "Pleasantville", una película que es una delicia y que, a pesar de que cuenta lo que ya nos conocemos de memoria, lo antes referido, lo hace desde un punto de vista completamente nuevo en su momento y que hoy sigue sorprendiendo. 

Dos hermanos muy diferentes y que se llevan mal, unos excelentes Tobey Maguire y Reese Witherspoon, se ven transportados desde el mundo real al mundo de Pleasantville, el pueblo que da nombre al filme. 

Pleasantville es un lugar bucólico inspirado por las series de televisión norteamericanas de los años cincuenta que narraban las historias cotidianas de familias sanas en entornos sanos (pueblos de la Norteamérica profunda habitualmente) y que representaban lo mejor del Sueño Americano mientras servían de ejemplo de todo lo que había que luchar por conseguir en la vida (casa con jardín, familia feliz, un buen trabajo, una rutina paradisíaca, desayunos copiosos en familia, un buen instituto para los niños, fines de semana de barbacoas al sol, vecinos solidarios y muy educados, partidos deportivos donde los más jóvenes ejercitan su capacidad de competencia...). 

"Pleasantville" es el nombre de la serie a la que el personaje de Maguire, un "loser", está enganchado. Ahora, él y su hermana tendrán que buscar la manera de salir de esta propia serie, de este lugar idílico, precioso, pacífico, sin malas personas, pero en el que late el conformismo más siniestro y enfermizo.

"Pleasantville" es una fábula que se enfrenta radicalmente a la persecución enfermiza del mencionado Sueño Americano y que se opone también de forma radical a todo conformismo, a toda uniformidad, a favor de la libertad e incluso del caos que pone a cada cual en su sitio. 

Gary Ross recrea un mundo originalísimo en el que se alterna el color y el blanco y negro (y en el que el color y su uso cobra especial relevancia narrativa), que se enfrenta a convulsiones y por medio del cual analiza el miedo al cambio, la intransigencia, la mediocridad provinciana, el poder del patriarcado más pacato, la independencia de la mujer, la corrupción, el populismo, la represión sexual o la hipocresía. 

"Pleasantville" es un peliculón bastante poco conocido y que no ha sido valorado hasta ahora, pienso. Muy reivindicable, aunque la carrera posterior de su director, siendo correcta, no haya sido ya tan innovadora.

No hay comentarios:

Publicar un comentario