viernes, 8 de diciembre de 2023

EL CHICO Y LA GARZA. LA ÚNICA PELÍCULA QUE NO ME HA CONVENCIDO DE HAYAO MIYAZAKI

EL CHICO Y LA GARZA de Hayao Miyazaki - 2023 - ("Kimitachi wa dô ikiru ka")

Sabe todo el mundo que me lee, aquí o en mis demás redes, que adoro, adoro profundamente a Hayao Miyazaki como artista y que no existe ni una sola obra suya que me parezca mala. "El viento se levanta", tal vez la que hasta este año era la más criticada, yo siempre la he defendido a capa y espada porque me resulta excelente e incomprendida. No obstante, no puedo, por primera vez en mi vida, decir que es maravillosa una película de su autoría. Ésta película de la que hablo es "El chico la la garza", basada libremente en la novela "¿Cómo vives?" de Genzaburo Yoshino.

La última obra animada de este gran creador ha suscitado reacciones encontradas en general. Es la primera de su filmografía que he observado en las redes que no ha gustado a fans suyos que hasta este momento, como yo, no le ponían ni una pega.

"El chico y la garza" me parece, preciosidad de su aspecto visual aparte (esto es indiscutible) una película excesivamente críptica, errática y con personajes que no están bien desarrollados. ¿La hace eso mala? No, porque tiene virtudes, pero sí que la hace, desde mi punto de vista, floja, sobre todo para lo que nos tiene acostumbrados el autor.

Hayao Miyazaki es otro de esos directores que, como Quentin Tarantino, llevan décadas "retirándose". "El chico y la garza" iba a ser su despedida definitiva: por suerte, él mismo ha declarado que al final no será así, que va a seguir dirigiendo.

No obstante, el aura de despedida, valga la redundancia, se puede leer en toda la trama, que es un compendio de muchos de los asuntos que ya ha tratado en otras de sus películas: el Japón del pasado y del presente, el encuentro de oriente con occidente, la ecología, los horrores de la guerra, la búsqueda de un camino propio en la vida o el poder y los claroscuros del arte.

"El chico y la garza" tiene una primera media hora preciosa y apabullante. Se nos presenta un contexto impactante y a un personaje protagonista con un conflicto muy crudo y problemático en un Japón que está sumergido en plena Segunda Guerra Mundial.

Por desgracia, la parte media decae mucho. Decae porque es demasiado extensa, porque es demasiado críptica (hasta el punto de que, tras el filme, debes de leer para tratar de vislumbrar sus intenciones) y porque sus personajes son muchos y poco desarrollados. 

Finalmente, todo se levanta de nuevo en un final emotivo y bello en el que podemos empezar a intuir qué es lo que Miyazaki nos quiere decir en su trama. No obstante, el resto le pesa, y mucho. 

El hecho de que el filme sea tan críptico no debería ser un problema a priori, porque otros de Miyazaki como "El viaje de Chihiro" o "El castillo ambulante" lo son y son maravillas. Sin embargo, el simbolismo de "El chico y la garza" es tan cerrado, tan opaco y tan abundante que acaba empantanando a una trama que parece estar para servir sólo a estas metáforas y alegorías. Eso no pasa en otras películas del director.

Sobra decir que la animación es una pasada, y los decorados, y los diseños de los personajes y criaturas que nos encontramos. Pero la trama es lo que es: descompensada, excesivamente retorcida, poco abierta a que sus símbolos sean más digeribles y con personajes que están, como he señalado, poco desarrollados (solamente el protagonista prácticamente tiene un hilo conductor).

Es una pena, pero no me ha convencido "El chico y la garza". Se me ha ido desinflando poco a poco y le he encontrado todas sus costuras. Y es una verdadera lástima, insisto. De todas maneras, es solamente éste un patinazo en una filmografía gloriosa. Hayao Miyazaki es un genio y no va a dejar de serlo. Prácticamente todo artista resbala alguna vez.

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