viernes, 31 de julio de 2020

BITELCHÚS. DESPEGA EL PRIMER Y SORPRENDENTE TIM BURTON PRE-BATMAN


"Bitelchús", realizada justo después de la olvidada "La gran aventura de Pee Wee" y justo antes del primer mítico "Batman" de Tim Burton, puso al realizador gótico de Hollywood en el camino al estrellato gracias a su imaginación desbordante y a su divertidísima y sabia combinación de elementos.

Bitelchus (Beetlejuice) no es nada más y nada menos que un exorcista de los vivos en el mundo de los muertos: trabaja echando de las casas "encantadas" a los vivos que las ocupan para que los muertos conserven su viejo hogar de siempre y vivan cómodamente.


La película no es que tenga una trama maravillosa más allá de la original premisa, pero despliega un mundo único y personalísimo (hoy ya demasiado "quemado" por el abuso desmedido que el propio Burton hace de él) donde los muertos llevan existencias completamente cotidianas en un ambiente que bebe del eterno expresionismo y que mezcla la mencionada cotidianeidad (impagable la oficina de funcionarios muertos) con lo grotesco, lo monstruoso y lo macabro pero siempre dentro de un tono alegre y "buenrollista".

Los diseños de los oscuros escenarios son maravillosos, y todavía más lo son los de los personajes muertos que los pueblan, una maravilla de los efectos especiales, del maquillaje, de la plastilina y del marionetismo (me quedo especialmente con los gusanos de la arena, joyitas).


El otro punto que hace a "Bitelchús" una gran película son sus personajes, encabezados por el exorcista de vivos (bioexorcista se llama él mismo) que le da su título: un homenaje a los humoristas histroínicos con un gag constante que mostrar cada segundo que se convirtió en un clásico instantáneo de la cultura popular y que estuvo interpretado por un sencillamente magistral Michael Keaton, que aquí entregó uno de sus mejores papeles: tan conscientemente irritante como cachondo, tan siniestro como tierno.

Los secundarios también destacan: la pareja ingenua y hogareña formada por Alec Baldwin y Geena Davis y la loca familia esnob "invasora" de su casa (más terroríficos que los propios fantasmas) conformada por Catherine O'Hara, Jeffrey Jones y una jovencísima Winona Ryder (que encarna a una niña gótica) también son un dechado de carisma.


"Bitelchús", que tuvo hasta su serie de animación para la televisión, sentó las bases de lo que iba a ser gran parte del cine posterior de Tim Burton y de lo que iban a ser sus particulares mundos, hoy ya fagocitados y refagocitados por el autor, por desgracia bastante perdido artísticamente hablando desde hace ya bastantes años.

Tras esta película, Tim Burton terminó de llegar al estrellado con su primer "Batman" (el cual comenté hace tiempo, con toda su su saga, en esta misma etiqueta).


miércoles, 29 de julio de 2020

NEANDERTAL. ROUDIER NOS LLEVA DE AVENTURA CON NUESTROS ANTEPASADOS


El francés Emmanuel Roudier es, además de creador de cómics y de juegos de rol y de tablero, experto en Prehistoria y en concreto en el periodo Paleolítico. 

Esta época, que le apasiona, sobrevuela una grandísima parte de su obra. "Vo'houna", "Ao, el pequeño neandertal" o la adaptación de la novela "La guerra del fuego" de J.H. Rosny se ambientan en estos tiempos, como la creación que hoy reseño.


"Neandertal" me ha parecido un cómic apasionante. Roudier bucea, con sus grandes conocimientos, en lo que pudo haber sido la vida del esta misteriosa especie extinta que vivió en parte de Europa y de Asia y que era tan diferente como a la vez parecida a la nuestra.

Su trama gira en torno a un grupo de tribus de este tipo de humanos que, en algún lugar de la mencionada Europa, se enfrentan a los problemas de vivir en una naturaleza brutal y en un inicio primigenio de sociedad que lucha por salir adelante.


La historia es épica, y bebe de la pura aventura. Tenemos drama, tenemos amores, tenemos amistad, tenemos familias enfrentadas y podridas, tememos venganza, tenemos lucha por la justicia y tenemos también incluso una pizca de humor que nunca desentona.

Roudier combina perfectamente estos elementos con un ritmo fresco, con unos diálogos excelentes y con unos personajes muy carismáticos y muy bien desarrollados, muy diferentes entre sí, pero que habrán de colaborar para salir adelante.


Por medio de esta trama el autor enarbola una bandera a favor de la unión, de la colaboración y de la fraternidad entre tribus culturalmente diferentes para lograr compartir y preservar los inventos de cada una de ellas y hacer así un mundo mejor.

El dibujo me parece una maravilla. Es preciso pero lleno de detalles, y la ambientación primigenia, de mundo prácticamente virgen y de constante amenaza está excelentemente recreada.


Se nota que el autor es experto en Prehistoria en este dibujo, que nos traslada verdaderamente a cómo se cree que fue la sociedad neandertal, y en la cantidad de información bien dosificada que incluye sin cesar, información que no estorba en absoluto al desarrollo de la trama principal.

"Neandertal" es un cómic magnífico, que se lee de una sentada y que me ha descubierto a un creador muy interesante dedicado a una época de la historia del planeta que creo que debería ser más tratada en los medios narrativos. Extremadamente recomendable.


lunes, 27 de julio de 2020

SHERLOCK. UNA SERIE MAGISTRAL A PESAR DE SU DESASTROSO ÚLTIMO CAPÍTULO


SHERLOCK de Steven Moffat y Mark Gatiss - De 2010 a 2017 - ("Sherlock")

A pesar de que su última temporada flojea y de que su último capítulo es horroroso, "Sherlock" me parece una de las mejores series de la última década sin paliativos.

Steven Moffat, experto en adaptaciones de personajes clásicos de la Literatura (habitualmente llevados a nuestros días) se unió con el novelista y comediante Mark Gatiss para traer esta versión moderna del detective más famoso del mundo.


"Sherlock", con sus fallos, es una delicia. Es magistral prácticamente toda ella. Y lo es basándose en una fórmula que en prácticamente todos sus capítulos funciona: cada uno adapta una novela o un relato de Arthur Conan Doyle (o partes de varios relatos) y, de repente, la trama da un giro radical que sorprende al fan del personaje para bien y que aporta una visión refrescante de sus historias.

Cada temporada tiene tres capítulos de una hora y veinte minutos de duración: son como tres películas. Y la dirección es frenética pero elegante, y se combinan a la perfección el "noir", el drama y los toques de comedia inteligente.


Son casi todos como he dicho una delicia, una joya. Redondos por norma general. Enganchan desde los primeros minutos, están llenos de sorpresas que nunca terminan, tienen un ritmo cuadrado al milímetro y adaptan perfectamente a Sherlock Holmes y a sus compañeros y villanos a nuestros días.

Benedict Cumberbatch y Martin Freeman están absolutamente inolvidables como el mencionado Holmes y su inseparable Watson. Desde el primer capítulo se meten a los espectadores en el bolsillo.

Alrededor de ellos orbitan otros tantos personajes, buenos y malos, tan carismáticos como ellos. No voy a hacer comentarios sobre los actores y las actrices que los interpretan porque podría fastidiar a quien no la haya visto todavía. Sí voy a decir que están todos geniales. Todos, absolutamente todos.


La serie, que empezó en 2010 y terminó en el reciente año 2017, se fue completando con parones, poco a poco, conforme Cumberbatch y Freeman se iban haciendo cada vez más famosos y tenían que alternarla con otros proyectos suyos para el cine o para la pequeña pantalla.

Tiene dos primeras temporadas perfectas, una tercera con ciertos puntos polémicos pero muy buena y una cuarta que se desinfla y que culmina en un como he señalado horripilante e inexplicable capítulo final. A pesar de ello, esto no lastra la que pienso que es, repito, una de las mejores series de la década.


-PRIMERA TEMPORADA. 2010

La primera temporada de "Sherlock" adapta, en tres capítulos magistrales e inolvidables, la novela "Estudio en escarlata" (en "Estudio en rosa", el primero) y los relatos "Los bailarines" y "Los planos del Bruce-Partington" en el segundo y en el tercero respectivamente (aunque hay elementos de otros y de otras novelas también en ellos).

No puede empezar mejor la serie. El episodio piloto es una obra maestra. Una vuelta de tuerca de alto voltaje, precisa, fiel a la esencia de los relatos de Conan Doyle pero con el punto justo innovador para no adaptarlos como fotocopias.


Sherlock Holmes no es del todo fiel al original. Tampoco su hermano Mycroft. Moffat y Gatiss se centran más en desarrollar a personajes ambiciosos dentro de su reducido mundo que a personajes interesados por hacer justicia. Sin embargo, el cóctel nuevo funciona, y muy, muy bien.

Watson sí es bastante más fiel, y es el contrapunto perfecto (y humano) a este Sherlock casi sociópata.


James Moriarty, el otro principal, pienso, no es del todo acertado, aunque se desarrollará en la segunda temporada. Creo que está demasiado influenciado por el Joker de Christopher Nolan, un tipo de villano que a principios de la década era muy copiado en numerosas películas y series.

Secundarios como el inspector Lestrade o la señora Hudson cumplen de sobra como las comparsas perfectas a una galería inolvidable.


-SEGUNDA TEMPORADA. 2012

El segundo tríptico de capítulos de "Sherlock", si bien como es lógico pierden cierta capacidad de sorprender con respecto al primero, mantienen el nivel no muy alto, sino altísimo.

El primero de ellos, "Escándalo en Belgravia" (basado en el grandioso "Escándalo en Bohemia") presenta a una Irene Adler inolvidable (que creo que tendría que haber aparecido más en la serie, la verdad) y en un caso retorcido, delirante, divertidísimo y que a la vez es un reto para el espectador. Magistral.

El segundo adapta "El sabueso de los Baskerville" y me parece igualmente fantástico. Traslada el famoso páramo de la novela a un ambiente militar y le mete a la trama original una curva inesperada que resulta del todo satisfactoria y novedosa (sin perder la esencia).


El tercero, "La caída de Reichenbach", adapta libremente "El problema final", y se imaginan a qué dos personajes enfrenta. Me parece un capítulo genial, aunque desde mi punto de vista falla la interpretación de Moffat y Gatiss de Moriarty.

Como he dicho, este Moriarty sí que creo que pierde la esencia original de los escritos de Arthur Conan Doyle. No está mal, pero no es Moriarty, y hace cosas que el verdadero personaje nunca, nunca haría. A pesar de todo, la temporada es redonda.


-TERCERA TEMPORADA. 2014

Como era de esperar, esta tercera temporada arranca con una adaptación de "La casa deshabitada", llamada "El coche fúnebre vacío".

Me sigue pareciendo un capítulo muy brillante, perfectamente articulado, con sorpresas bien explicadas y coherentes dentro de toda la precisión delirante que ha de tener una buena historia de Sherlock Holmes.

Los dos siguientes estarían en esta línea. Tal vez son menos redondos (o menos redondísimos, si puede decirse) que los siete anteriores, pero cumplen, y de sobra.


"El signo de los tres" es un episodio diferente, humorístico casi, y que viene muy bien como un soplo de aire fresco después de todo el dramatismo que tuvieron los anteriores. Adapta libremente, por supuesto, la novela "El signo de los cuatro".

"Su último juramento" tiene elementos muy polémicos, que posiblemente no agradaron en su momento a los fans más ortodoxos de Sherlock Holmes. Sin embargo, a pesar de estos elementos, que trastocan tal vez demasiado la esencia de algunos personajes, el capítulo me parece otra joya y creo que tiene un final memorable.


-ESPECIAL DE NAVIDAD DE 2016

Entre la tercera y la cuarta temporadas, Moffat y Gatiss sacaron un especial de Navidad en el año 2016 que se emitió por vez primera el 1 de enero de dicho año.

Aquí, de forma entrañable, aunque fallida finalmente, viajamos a 1895. Estamos en los tiempos de Conan Doyle, en el Londres de los coches de caballo y de los crímenes sin resolver, del clasismo y del contradictorio optimismo por el siglo que está a punto de entrar.


Este especial, llamado "La novia abominable" e inspirado en "El ritual de los Musgrave", es muy entretenido y muy divertido, aunque es notablemente ya menos brillante que todo lo que hemos visto anteriormente en la serie.

Además, tiene un fallo que desde mi punto de vista es bastante gordo: la explicación final de todo, de por qué estamos de repente en el año 1895. Creo que es una excusa, una huida hacia adelante, impropia de la precisión de bisturí con la que Moffat y Gatiss habían tratado toda la serie hasta este momento. Muy fallido.


-CUARTA TEMPORADA. 2017

En la cuarta temporada sobreviene el desastre. Por desgracia. Por maldita desgracia, porque hasta aquí la serie había sido prácticamente perfecta en prácticamente todos sus episodios.

"Las seis Tatcher", basado en el cuento "Los seis Napoleones", todavía sobrevive a la quema. No tiene la brillantez de otros capítulos, pero es efectivo, es interesante y viene con una sorpresa final que, la verdad, a mi me pilló totalmente desprevenido.


En el segundo, "El detective mentiroso", basado en "El detective moribundo", se mete ya un poco la pata. Aunque Toby Jones, actor que interpreta al personaje central de este capítulo, está del todo esplendoroso, al final la trama cae en lo predecible y en un giro que no gustó nada a los fans de Holmes (y que no revelaré).

"El problema final" es el polémico episodio final, valga la redundancia. Y es, de verdad, del todo surrealista (para mal). Moffat y Gatiss se sacan de la manga un completo absurdo lleno de enigmas demenciales que se resuelven por arte de magia.


Todo es un despropósito aquí. Los personajes nuevos, las referencias a otros capítulos (la mayor parte gratuitas), el caso en si y hasta el escenario donde todo tiene lugar, que abraza el pulp más descabellado (cuando en ningún momento había tenido esta producción este elemento). Un verdadero y decepcionante desastre.

Un capítulo malo y un par regulares no pueden destrozar, sin embargo, a una serie que hasta este momento es del todo impresionante. Lástima que el pespunte final haya sido tan horrendo. Pero que esto no les disuada de verla: "Sherlock" es una obra maestra en el 90 por ciento de su metraje.


domingo, 26 de julio de 2020

LINTERNA VERDE. DC SALE DE SUPERMAN Y BATMAN... CON UN BODRIO GIGANTESCO


Hasta 2011, habían sido los superhéroes de la casa Marvel los protagonistas casi absolutos de la gran pantalla exceptuando a Superman y a Batman, las dos grandes estrellas de DC Cómics.

Incluso antes de la llegada del Universo Cinematográfico de la mencionada Marvel, sus personajes ya inundaban las carteleras de los cines mientras que la compañía del hombre de acero y del hombre murciélago solamente se centraba en estos dos (con resultados de todo tipo: desde los horrendos Batman de Schumacher hasta los geniales de Nolan).


Linterna Verde es el primero de DC en llegar a los cines en la nueva década. Lo hizo todavía fuera de su actual universo cinematográfico y lo hizo, por desgracia, en una terrible bazofia.

Martin Campbell es un artesano que se mueve sin cesar entre la solvencia y la mediocridad. Es capaz de entregar un peliculón como "Casino Royale" y una infamia como ésta que hoy comentamos.


Aquí, el neozelandés dirigió una cinta en la que, una vez más, nadie se tomó en serio al personaje al que se adaptaba, algo que era muy propio de aquellos momentos de grandes bodrios como "Daredevil", "Elektra", "Spiderman III", "X-Men: La decisión final", "Los 4 Fantásticos" de la pasada década o los "Motorista Fantasma".

Interpretado con poca gracia por Ryan Reynolds, este Linterna Verde no tiene profundidad ninguna, al igual que todos los secundarios que le rodean, a los que da vida un reparto más que aceptable pero que no puede hacer nada con caracteres tan planos y con diálogos tan tópicos.


Por otra parte, las escenas de acción son sosas y aburridas, y culminan en uno de los combates finales más tontos y olvidables visto en mucho tiempo en una película de superhéroes.

El humor tiene dos o tres gracietas en plan homenaje con cierta efectividad, pero no por ello deja de ser tontorrón y hasta vergonzante por momentos.

Finalmente, el mundo de los Linternas Verdes está tratado de manera bastante superficial, al igual que sus relaciones con el villano Parallax.


La película, además, es estéticamente fea: el verde billete rodeado de tonos azulados y morados no es grato a la vista, y el emplaste de efectos especiales (cutres, además) llega a ser cansino de pura sobrecarga.

Aunque el mencionado universo de DC en el cine iba a empezar en los años inmediatamente posteriores, esta "Linterna Verde" no fue incluida en su ciclo y quedó bastante olvidada.

Esperemos que el personaje vuelva y que lo haga con dignidad, aunque lo cierto es que no sabemos qué es lo que pasará al final con el propio DCU, que lleva desintegrándose y dando palos de ciego varias películas ya.


sábado, 25 de julio de 2020

MERLÍN EL ENCANTADOR. LA FILOSOFÍA EDUCATIVA DE DISNEY CAMBIA PARA SIEMPRE


La última película del estudio de Walt Disney que se estrenó en vida del gran maestro de la animación fue esta maravillosa e infravalorada (por lo eclipsada que ha sido por otros clásicos de dicho estudio) "Merlín el Encantador", una película de corte claramente "educativo" pero que ya da muestras de que los tiempos han cambiado con respecto al conservadurismo tradicional de las décadas anteriores en los USA.

Las lecciones de los primeros filmes de Disney como "Pinocho" o "Dumbo", basadas en la amenaza y en el miedo al castigo (convertirse en burro por ser un niño "malo", ser perseguido por siniestros elefantes rosas por beber alcohol) son sustituidas por las sabias enseñanzas del mencionado mago Merlín, el profesor entregado, bondadoso y comprensivo que todos querríamos haber tenido alguna vez y que enseña mediante ejemplos y no mediante el terror.


Grillo, un pre-adolescente Rey Arturo, se prepara junto a Merlín para un futuro glorioso y aprende la lección principal de su vida: la sabiduría y la habilidad vencen a la fuerza bruta y la bondad vence a la maldad.

El cambio que se ha operado en la filosofía educativa de la compañía es bien patente (y muy de agradecer).

"Merlín el Encantador" sigue una trama ciertamente didáctica en la que el jovencito Arturo y el espectador viajan por diferentes medios (el acuático, el arbóreo, el aéreo...) estudiando la naturaleza y asuntos tan variados como el ciclo de la vida, el amor a los animales, el juego limpio en todas las empresas, los avances de la ciencia, la autoestima o el primer amor frustrado por imposible (maravilloso el capítulo de las ardillas con toda su parte triste y desoladoramente "realista").


Todo, por supuesto, acompañado por la animación maravillosa de siempre y por la esplendorosa y mágica ambientación de siempre y, además, por una galería de personajes como siempre fantástica (el búho Arquímedes y la loca y malvada Madam Mim son dos de los seres más personales y divertidos del estudio de Walt Disney y por desgracia dos de los más olvidados).

"Merlín el Encantador" debe ser reivindicada sin cesar y revalorizada como se merece. Creo que es una de las mejores películas de este estudio y una creación básica, como he dicho, para entender un cambio de época. 


jueves, 23 de julio de 2020

LA FAMILIA QUE TÚ ELIGES. PRECIOSA ROAD-MOVIE SOBRE LA BÚSQUEDA Y LA SANACIÓN


"La familia que tú eliges" (de título real y más apropiado "The Peanut Butter Falcon") me ha parecido una película encantadora.

Es la primera larga (o al menos eso dice en varios lugares en los que lo he podido leer) del dúo compuesto por Tyler Nilson y Mike Schwartz, y es una "road movie" que puede resultar predecible, pero que está hecha con un cariño y una alegría de vivir sin par.

Tenemos personajes perdidos y heridos por la vida. Tenemos un viaje a través de la socorrida Norteamérica profunda. Tenemos un mensaje a favor de, como dice el título en español, elegir a la propia familia.


Amistad, amor, viaje interior y exterior, encuentro personal, sanación vital, autodescubrimiento. Todos los ingredientes de su género bien agitados en una preciosa historia sobre la lucha por salir adelante y por encontrar un camino en la vida.

Los diálogos son magníficos, el humor es divertidísimo y sincero, los personajes se meten a los espectadores en el bolsillo desde el primer momento (y también los secundarios) y, además, tanto la fotografía de los espléndidos paisajes en los que todo transcurre como la preciosa banda sonora son una delicia.


El trío protagonista está, finalmente, también genial. Shia LaBeouf demuestra que es un grandísimo actor (creo que lleva años siendo injustamente denostado por algún mal papel que eligió hace ya más de una década) y Dakota Johnson demuestra lo mismo y se sacude el fango de las "50 sombras de Grey" en el que también se habían empecinado muchos en encasillarla por la fuerza.

Pero es Zack Gottsagen la verdadera revelación. El actor, debutante en el largometraje, entrega un papel genial. Sentido, divertido, con un carisma insuperable y con momentos que ponen los pelos de punta.

"La familia que tú eliges", que está ahora mismo en las salas de cine, es una película muy, muy recomendable. Vayan a verla. Se encontrarán con una magnífica sorpresa.


martes, 21 de julio de 2020

KUROSAWA. VÍCTOR SANTOS RECORRE LA VIDA Y LA OBRA DEL GRAN DIRECTOR


KUROSAWA. EL SAMURÁI CAÍDO de Víctor Santos - 2020 - ("Kurosawa. El Samurái caído")

Víctor Santos es uno de los nombres más importantes del cómic español. Dibujante y guionista de series tan variadas como "Los reyes elfos", "Pulp Heroes" o "Polar", compagina su carrera entre este país y el mercado norteamericano (para el que ha trabajado con nombres como Brian Azzarello).

Tal vez no sea la mejor obra para reseñarlo por primera vez, pero me ha encantado su "Kurosawa. El samurái caído". Me acerqué a este cómic porque amo profundamente la filmografía de Akira Kurosawa, y me he encontrado con una gratísima sorpresa.


Víctor Santos ama, como yo, al gran genio del cine japonés. Se nota en cada página. En cada dibujo. En cada explicación. Desprende cariño por los cuatro costados.

Si alguien quiere iniciarse o profundizar en la obra de Kurosawa, debe leer este cómic. En poco más o menos de cien páginas se recorre, con una gran capacidad de síntesis, la vida y las películas (una por una) del director de "Los Siete Samuráis".

Se mezcla el biopic, el ensayo y la opinión personal, pero también hay lugar para el retrato poético y vital. 


Santos toma como punto de partida los primeros recuerdos del creador nacido en 1910, que tuvo que vivir en un Japón terrible y convulso (esencialmente el de la Segunda Guerra Mundial y la monstruosa posguerra que le siguió) y que además tuvo que lidiar con durísimos dramas familiares y personales.

A partir de aquí, hila un recorrido por los que fueron los principales puntos de inflexión en su vida y, como he dicho, por sus películas, que va comentando una por una. La información es riquísima y está espléndidamente dosificada.


Las secuelas de la bomba atómica y de la guerra en su vida, el poso que dejó el suicidio en su juventud y sus posteriores problemas de depresión, su lucha contra el sistema de producción cinematográfico japonés, su ascenso a la fama paralelo al cierto desprecio que vivió tanto en Japón como fuera de sus fronteras por ser considerado un director "demasiado occidental", el peso de la figura del maestro y el alumno en sus cintas... Todo está en "Kurosawa. El samurái caído".

Además, conecta al director con sus influencias actuales, con todos esos compañeros de profesión que le adoraron, en un sentido homenaje (las últimas páginas del cómic son geniales).


El dibujo de Víctor Santos es sencillo pero primoroso, carismático y delicado, y nos lleva directamente a la ambientación de las películas de las que habla.

"Kurosawa. El samurái caído" es un cómic excelente para todo amante del cine, del cine japonés en particular y, en general, para todo amante del arte y de la vida.

lunes, 20 de julio de 2020

CAMINO A LA PERDICIÓN. UNA ESMERADA JOYA NEGRA DE SAM MENDES


La segunda película de Sam Mendes tras "American Beauty" le supuso un cambio de registro total que marcaría ya el resto de su carrera, en la que hasta este momento ha tocado numerosos géneros (el drama familiar y de pareja, la comedia romántica, el negro, el bélico y hasta James Bond se han dado la mano en su filmografía).

"Camino a la perdición", basado en un cómic de Max Allan Collins que a su vez está inspirado libremente en el imprescindible clásico japonés "El lobo solitario y su cachorro", es una película negra fieramente clásica que homenajea al cine de gangsters del Hollywood dorado con muchos de sus elementos habituales.


Articulada como una road-movie por la Norteamérica profunda y ambientada en los años de la Gran Depresión, trata asuntos como la hermandad y la traición, la redención, la hipocresía religiosa de la mafia, el fracaso de la familia enmarcada en un entorno de violencia y la propia violencia, de la que un padre mafioso intenta salvar a su hijo pequeño.

Un excelente y sufriente Tom Hanks es este hierático mafioso en uno de los grandes papeles de su carrera, y un también destacado Tyler Hoechlin es su hijo pequeño.


Les acompañan unos geniales Paul Newman (maravilloso en su atormentado papel) y Jude Law (haciendo de un repugnante malo malísimo de manera muy personal), y un Daniel Craig pre-James Bond que ya empezaba a despuntar poco a poco y que aquí crea un personaje deliciosamente ruin, despreciable, liante e inepto.

"Camino a la perdición" no muestra nada que no hayamos visto ya en otras películas negras de gangsters, pero es en todos los aspectos una obra de factura excelente con un ritmo comedido y unas breves escenas de acción y persecución cuadradas al milímetro en las que lo épico, lo brutal y lo realista se mezclan sin fisuras.


Tiene momentos excelentes que sólo un gran director puede conseguir (Hanks y Newman tocando juntos el piano, la presentación del personaje de Law, la llegada a la gran ciudad por vez primera, las persecuciones y tiroteos llenos de nervio, el encuentro final bajo la lluvia o ese maravilloso epílogo...) y la fotografía y la banda sonora son absolutamente preciosas, así como exquisita la representación histórica de la época.

La segunda obra de Sam Mendes es una joyita impecable realizada con esmero y amor por el trabajo bien hecho.