MONSTER de Naoki Urasawa - De 1994 a 2002 - ("Monster")
Naoki Urasawa me parece uno de los más grandes genios del cómic de las últimas décadas. Profesor de manga de la Universidad de Nagoya y ganador de numerosos y prestigiosos premios, es un maestro que ha incursionado en numerosos géneros y que ha revitalizado otros.
Es además músico y presentador de la serie "Urasawa Naoki no Manhem", en la que en formato de documental analiza la obra y el estilo de todo tipo de creadores de manga como él.
Tal vez sus dos obras más famosas sean "20 Century Boys" y la que hoy comento, "Monster", anterior a ella y la que le lanzó de forma definitiva al gran reconocimiento (aunque ya tenía una larga carrera a sus espaldas, con éxitos deportivos como "Yawara!" o como "Master Keaton").
"Monster", publicada entre 1994 y 2002, es uno de los cómics japonesas capitales, pienso, no solamente de los últimos años, sino de la historia del medio más allá del propio Japón. Lo colocaría sin dudarlo entre los "noir" imprescindibles.
"Monster" es, pienso, una historia a grandes rasgos sobre el bien y el mal y sobre sus dualidades. Estas dualidades están en sus páginas presentes de forma constante, desde en las situaciones hasta en los personajes.
Porque en este manga se alternan sin cesar la malevolencia más cruel y monstruosa con la solidaridad y el amor más incondicional. Personajes terribles y oscuros, insondables y maquiavélicos se dan la mano constantemente con personajes entregados, que ayudan a los demás aunque apenas los conozcan e incluso sacrificando su propia seguridad.
"Monster" es, con estas premisas, un cómic de protagonista colectivo y, también, de "tema colectivo". Todo lo que hay en sus ocho años de publicación, en sus nueve grandes tomos, es un caleiodoscopio moral, social, político y emocional de toda una época: los años noventa en la Europa de la Caída del Muro de Berlín.
Dentro del asunto central del bien y el mal, Urasawa habla de una Europa convulsa sumergida en un cambio rápido y atroz, de unas sociedades que bajo su desarrollo económico esconden negras trastiendas, de regímenes dictatoriales que caen y de nostálgicos de estos regímenes, de radicalismos de todo pelaje y de los hipócritas que se sirven de ellos, del uso político de las personas, de memoria histórica, de inmigración, de racismo, de injusticias y de relaciones humanas de toda clase.
"Monster" es un compendio gigantesco de temas, y todos ellos están bien delineados y tratados, con una grandísima lucidez que pivota alrededor de un ser humano que es capaz de hacer lo mejor y lo peor pero que a veces también no es más que una presa de sus circunstancias.
Como he dicho, se articula todo alrededor de un personaje colectivo. Hay un protagonista claro, y un villano claro, pero el plantel de seres que les rodean a ambos es enorme y no deja de sorprender y, cada uno, en mayor o en menor medida, representa uno de los asuntos básicos que la serie trata.
Estos personajes son bombas de carisma. Desde el más solidario al más malévolo. Los hay capaces de estremecernos con una simple mirada, y los hay capaces de hacernos llorar y creer en que la vida merece la pena.
Naoki Urasawa es consciente de esta dualidad constante, y aprovecha también para lanzarnos un mensaje que es en el fondo positivo (aunque lo haga tras hacer que nos asomemos al abismo) y que abre puertas al cambio, a la redención.
Todo esto está ordenado en una trama "noir" magistral. Simplemente, magistral, y con todas las letras. La intriga de "Monster" no nos deja un segundo de respiro, y la habilidad de su autor para engancharnos a ella es absolutamente prodigiosa.
Lo que empieza como un caso simple se bifurca en mil pequeñas historias atadas con una precisión y coherencia de relojero. Todos los personajes, todas sus historias, valga la redundancia, todos los casos menores tienen algo que decir en el gran caso central de "Monster".
Urasawa es un autor prodigioso, con una memoria brutal, con una delicadeza de cirujano a la hora de construir un retrato gigantesco y complejísimo, lleno de recovecos, de momentos lúcidos, de escenas y personajes para el recuerdo.
Su dibujo termina de hacer el resto: es realista, sobrio, fino y delicado, extremadamente expresivo en los personajes y en sus gestos (que como he dicho pueden hacer llorar o pueden crear el puro miedo en una sola página) y extremadamente detallista.
El carisma de los mencionados personajes se va acentuado con su diseño, y los escenarios de los países por los que van viajando parecen estar ante nuestros ojos.
"Monster" fue un éxito de público y de crítica instantáneo tanto dentro como fuera de Japón. Tuvo un anime, que no he podido ver, pero que no dejan de recomendarme: me aseguran que es igual que el manga y que tiene además una animación fabulosa.
En fin: hoy tocaba obra maestra en mi espacio de cómics. La ha releído en estos meses y me sigue poniendo los pelos de punta, tanto cuando me aterroriza como cuando me hace creer en la esperanza de un mundo mejor. No dejen de leer "Monster".
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