PERRO LADRADOR, POCO MORDEDOR de Bong Joon-ho - 2000 - ("Flandersui gae")
"Perro ladrador, poco mordedor", la primera película de Bong Joon-ho, es, a todos los efectos, una suerte de antesala de "Parásitos", la obra suya que pienso que hasta este momento es la más famosa (merecidamente: me parece magistral).
El director surcoreano comenzaba su carrera en el año 2000 con un filme que tuvo una recepción fría en taquilla en su momento y que no es perfecto pero que anticipa varios méritos que tendría el posterior cine de su autor, que menos mal que siguió dirigiendo.
"Perro ladrador, poco mordedor" es una comedia negra satírica de enredos que, a partir de una premisa muy simple (un tipo quiere matar al perro cojonero de su vecino, que no para de ladrar de forma desquiciante) hilvana una historia casi coral que sirve para exponer una Corea del Sur supuestamente dinámica y moderna que sin embargo en realidad tiene bastantes cosas en común con la de su pasado más brutal. El símbolo: los perros, que en el país según leo se comieron mucho en tiempos pretéritos y que en aquellos primeros 2000 al parecer para algunas personas eran todavía platos deliciosos.
El filme es un retrato de una lucha de clases enrarecida, ambientada en un macro-edificio de viviendas de un barrio urbano que parece más o menos digno. Los personajes están llenos de claroscuros y ninguno es blanco o negro, y los conflictos que tienen son mediocres y a veces hasta patéticos pero articulan con lucidez unas vidas ancladas en la rutina y en la insatisfacción perfectamente reconocibles.
Alrededor de estas premisas pivotan asuntos como la pobreza, la corrupción, el maltrato animal, la frustración vital, el abandono de los ancianos, el abuso laboral, la culpa, la falta de aspiraciones y oportunidades.
Hay un uso del espacio simbólico que estará también en la mencionada "Parásitos": el bloque de apartamentos es un personaje más del filme, con sus azoteas luminosas y sus sótanos negros y abandonados. Las clases están separadas de forma más que metafórica.
"Perro ladrador, poco mordedor" no es tan perfecta como la de nuevo mencionada "Parásitos". Le falla el ritmo a veces, y muchos de sus elementos se introducen de forma abrupta y hay personajes y hechos mejor desarrollados que otros. No obstante, es una ópera prima bien realizada, con géneros bien mezclados, original y prometedora. Ha quedado algo olvidada en la filmografía de su autor, eclipsada por otras obras ciertamente mejores, pero es un muestrario interesante en su imperfección de lo que vendría después.
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