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jueves, 13 de julio de 2023

BLACK MIRROR TEMPORADA VI. UN CAPÍTULO GENIAL... Y UN RESTO DESASTROSO

BLACK MIRROR. TEMPORADA VI de Charlie Brooker - 2023 - ("Black Mirror")

Que "Black Mirror" estaba tocada y hundida lo dije hace tiempo por aquí o por mis otras redes, cuando fui viendo las últimas temporadas de una serie que fue absolutamente revolucionaria y profética (sí, se han cumplido muchas de sus predicciones, por lo menos en parte) y que ha acabado masticada y escupida por el sistema más comercial, que sólo quiere más, y más, y más y da igual la calidad que tenga todo mientras venda más y más y más.

La temporada quinta de esta serie fue un desastre, y lo vuelve a ser la sexta, que se acaba de estrenar (aunque tenga un capítulo espectacular: solamente es uno). "Black Mirror" fue rompedora en 2011. Tiene más de diez años y muchos capítulos a sus espaldas, y lo que ya se le puede sacar tras tanto tiempo y tanta producción no es más que refritos de ideas previas o giros extraños sin mucho sentido.

-JOAN ES HORRIBLE

Esta sexta temporada empieza con un episodio con una primera parte brillante: "Joan es horrible". Y posiblemente profética: si no legislamos ya sobre las Inteligencias Artificiales, que tan polémicas están siendo últimamente, nos podemos encontrar con sorpresas desagradables. 

La primera media hora de esta "Joan es horrible" es sencillamente espectacular: una joya, una maravilla sobrecogedora, que da en la diana, que nos pone contra las cuerdas y que nos estremece. 

Por desgracia, la segunda media hora me parece un desastre: nadie sabe cerrar el capítulo y se opta por dar un giro de timón radical que no tiene a cuento y que desvirtúa todo lo anterior y lo tira por tierra para dejar su mensaje colgando y sus intenciones satíricas salvajes en una historietita divertida sin más. Mal. Muy mal. Y una lástima.

-LOCH HENRY

"Loch Henry", el segundo capítulo, sí me parece una obra maestra. Aquí me quito el sombrero. Y en gran parte lo es porque es puro "Black Mirror", pero del de los inicios de la serie. Una parábola social ambientada en nuestro mundo, en un futuro cercanísimo y muy reconocible, que explora una historia desagradable en la que caben desde las leyendas urbanas o un retrato salvaje del éxito y del poder a la "Inglaterra vaciada" (el problema de las localidades rurales dejadas de la mano de los políticos está presente en muchos países) pasando por el turismo desaforado y la mercantilización de absolutamente todo. No digo más que: véanla. Una obra maestra, repito.

-MÁS ALLÁ DEL MAR

Por desgracia, aquí acaba todo el buen hacer de esta temporada. "Más allá del mar", el tercer episodio, tiene una premisa interesantísima que acaba deshecha en un drama bastante alargado y simplón y que deja sin desarrollar otra vez el problema social y tecnológico que plantea. Es correcto, pero desinflado. Eso sí, un aplauso enorme para Aaron Paul, que hace un papelón espectacular y lleno de aristas y focos diferentes.

La cosa a partir de aquí se pone ya peor, y mucho peor: los dos últimos capítulos son, además de malos, inexplicables. ¿Por qué? Pues porque no son "Black Mirror". Entiendo que quieren homenajear, como los anteriores, a géneros cinematográficos (en este caso el terror o la comedia de terror) y a épocas anteriores (los años 2000 y los años 70), pero... No son "Black Mirror". No. Y no sé, sinceramente, a cuento de qué vienen. No tienen un solo elemento típico de esta serie. Ni uno. Se han colado de otra producción aquí.

-MAZEY DAY

"Mazey Day", el cuarto, es una crítica a los fotógrafos paparazzi ambientada en la década de los 2000 sin ningún elemento "Black Mirror", como he dicho. No hay nada, pero nada de nada, que la identifique con esta serie que estamos comentando. Y su mensaje social es muy simplón y su desenlace un absoluto desastre y un sinsentido. Horroroso.

-DEMON 79

Pero no se vayan que el quinto es aún peor: "Demon 79" es una suerte de comedia de terror de estilo setentero con muchos homenajes divertidos pero con una trama totalmente absurda, sin pies ni cabeza, con giros entre tontos y predecibles y con un desenlace que es una tontería inmensa y facilona. Como he dicho, tampoco tiene nada de "Black Mirror": menos incluso que "Mazey Day".

Señoras y señores: hay que cerrar ya esta serie. Ha tenido su recorrido, y hasta hace pocos años ha sido un recorrido brillante. Déjenlo ya, déjenlo donde está. Aquí ya no hay ni ideas nuevas, ni ideas buenas, ni mordacidad, ni ironía, ni nada de lo que hizo grande a esta creación de Charlie Brooker en la pasada década. El ciclo de "Black Mirror" ha pasado y esto ya huele mucho a rancio. Hora de irse ya a otra cosa de forma definitiva.

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