ANTLERS. UNA PELÍCULA DE TERROR INTERESANTE CON MONTAJE INSOPORTABLE

ANTLERS de Scott Cooper - 2021 - ("Antlers")

A falta de ver "Los crímenes de la academia", "Antlers" me parece la única película mala hasta la fecha de Scott Cooper, un director americano que creo que no está todavía todo lo reconocido que debería estar y que desde 2009 nos lleva regalando obras geniales como "Corazón rebelde", "La ley del más fuerte" u "Hostiles" (todas ellas comentadas en este blog).

"Antlers" es su primera creación fílmica de terror, y en ella retoma el mito del wendigo para reinventarlo en un clásico pueblo de la Norteamérica profunda de esos en los que además de lo paranormal laten secretos y se desarrollan historias complicadas entre sus habitantes.

El filme empieza de una manera interesante, con la presentación de dicho pueblo y de los vecinos que van a protagonizar la historia y con inicios de tramas que tratan de hacer un retrato social competente, pero pronto, tras la primera media hora de metraje, se va todo por las ramas con un montaje que es verdaderamente insufrible y que no me explico cómo ha sido tolerado por Cooper o por quien fuese la persona encargada de él. 

No es solamente que este montaje sea abrupto: es que tiene tajos por todas partes, lagunas enormes, torpezas narrativas casi forzadas, tropiezos de ritmo inexplicables. Debido a esto, los personajes se desarrollan a trompicones, e igualmente le ocurre a la intriga, y por ello todo se pierde y deja de interesar de forma bastante rápida. 

Los intérpretes están bien, en especial Keri Russell y Jesse Plemons, pero sus personajes tienen tantos flecos que no brillan. Todo ello amén de una resolución bastante absurda con decisiones de guión que no se sostienen por ninguna parte y que se tiran de cabeza a los tópicos del terror más cutre cuando precisamente buscan todo lo contrario.

Sólo salvo de "Antlers" su aspecto visual: está muy cuidado. Sus efectos especiales son muy resultones y su ambientación, que enraíza en el "folk horror" más norteamericano, está muy conseguida. Por desgracia, lo demás falla por completo. La primera película en la que Scott Cooper no cumple.